Borrell quiere ser el interlocutor

José Borrell planteará hoy, en términos amistosos pero también firmes, al secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, la necesidad de que sea él, como candidato a la Presidencia del Gobierno, quien acuda en adelante a las convocatorias de José María Aznar para conducir el proceso de paz en el País Vasco. Borrell ha llegado a la conclusión de que no puede estar ausente del escenario en el que se va a hablar de uno de los problemas que más preocupan a los españoles y que va a polarizar la atención de la vida política durante muchos meses.

Borrell hará este planteamiento a Almunia en la conversación que tendrán esta mañana, antes de que se reúna la dirección del PSOE. También planteará la necesidad de asumir un cierto papel de interlocutor con los líderes de las otras fuerzas políticas y no sólo con el Gobierno.

Uno de los últimos roces entre ambos dirigentes del PSOE se produjo cuando Borrell, pocas horas después de haber criticado duramente a los nacionalistas por menospreciar la Constitución en la Declaración de Barcelona, se enteró por la pregunta de un periodista de que Almunia iba a entrevistarse con el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol.

Tanto Borrell como Almunia coinciden en que Aznar debería convocar una reunión del Pacto de Madrid, para que todas las fuerzas democráticas discutan conjuntamente, y no en entrevistas bilaterales con el Gobierno, los pasos que se pueden y deben dar para sacar el máximo provecho a la tregua de ETA y lograr el cese definitivo del terrorismo. Pero si el jefe del Gobierno no tomara esa iniciativa, Borrell cree que debería ser él quien acudiera por el PSOE a La Moncloa en la próxima ronda de consultas.