"Una televisión pública debe inducir opinión y capacidad creativa"

BERNARDO DÍAZ NOSTY CATEDRÁTICO DE PERIODISMO Y CONSEJERO DE LA RTVA Fue el primer decano de la facultad de Ciencias de la Información de Málaga, donde es catedrático y no da clases por estar en comisión de servicios. Cree que la mayor carencia del Foro Siglo XXI es la ausencia de jóvenes. Crítico con la televisión pública donde es consejero, cree que hay que eliminar sus valores "ruralizantes y cutres" y atender a nuevos públicos.Pregunta. ¿Asesoraría al Gobierno socialista en temas de comunicación institucional si se lo pidieran? Respuesta. El foro va más allá: se trata de crear un escenario nuevo por el que pueda discurrir la Andalucía del siglo que viene por encima incluso de decisiones partidistas. Creo que se trata más de reflexionar en voz alta sobre Andalucía que de asesorar al gobierno. P. ¿Escucharemos todas las reflexiones o su resumen consensuado? R. La reflexión sobre Andalucía la tienen que hacer todos los andaluces. Lo que pasa es que hay líderes de opinión o ámbitos de debate como la Universidad, que tienen estructuras más propicias para la creación del pensamiento y deben reflexionar para animar el debate de todos para que la respuesta política de los andaluces esté basada en el conocimiento y no en mecanismos de autocomplacencia y valores que ya han quedado caducos. P. La crítica más común a Canal Sur es que la visión que ofrece de lo andaluz resalta los aspectos zafios y folcloristas. R. Mi trabajo como consejero de Canal Sur está en coherencia con el discurso del progreso de la autonomía. Y el progreso de Andalucía no puede asentarse en una visión raquítica. Creo que se están dando pasos como la creación del Canal 2 para regenerar el sistema de televisión pública andaluza. No hay progreso con ideas estáticas y valores tópicos. El progreso se hace a partir de la razón y la razón está en el diálogo. Los raseros que definen la cultura audiovisual de Canal Sur son pobres. No podemos reproducir un PRI informativo. No digo que suceda, sino que hay que evitar que pueda suceder. P. ¿Qué tenemos que decir ante la Europa audioviosual? R. Tendremos que cambiar cosas antes de que desde la UE nos lean la cartilla. Porque ya en Europa se está empezando a redefinir lo público en materia audiovisual, no confundiendo aspectos mercantiles y comerciales con lo que son áreas de servicio, de interlocución pública, líneas de debates y participación que no proporciona el mercado privado y sí deben hacerlo estos servicios públicos que pagamos todos. P. También se sufraga con publicidad, como una privada. R. En el tema de la financiación, el comisario de la competencia europeo nos va a dar un pequeño repaso. En Europa se está diciendo claramente que no se puede, con fondos públicos, estar participando en aventuras comerciales que pueden afectar la libre competencia. P. Para después flotar empresas privadas alimentadas con el dinero de todos en situación de monopolio, como Telefónica... R. Esto es. Por eso entiendo que la televisión pública no debe tener ataduras comerciales, ni dependencia de los anunciantes. Además eso propicia una situación de gran libertad y capacidad creativa. El tiempo que viene es de tematización: hay una esfera de dominio público definida por valores culturales informativos, educativos y participativos que probablemente no van a dar las televisiones comerciales porque no les es rentable. Las televisiones públicas deben ser televisiones no muy caras pero sí muy satisfactorias. Si no para un gran público, sí para muchos públicos. Cada vez hay que atender a más colectivos que actualmente está desamparados. P. Por ejemplo, los relacionados con la creación o la ciencia. R. Los artistas, los científicos, la gente del teatro, los deportistas. Hay que tratar de crear opinión en aquéllos que a su vez luego crean opinión en la sociedad. Es decir, una televisión pública debe inducir opinión y capacidad creativa. Cuando alimentamos a la sociedad valores cutres, casposos o retrógrados o ruralizantes, como estos debates por las tardes con señoras, no estamos activando estos mecanismos de progreso. En toda gestión pública hay que tender al progreso, del tipo que sea, no ir hacia atrás. P. Usted ha recordado el hándicap de que en Andalucía no existan medios que articulen la conciencia regional. R. Sí es cierto. No hay un La Vanguardia o un La Voz de Galicia, como sucede en Cataluña o Galicia. Con estos problemas, el papel de Canal Sur es de una altísima responsabilidad política, cultural y social. La única manera de crear medios en clave autonómica es produciendo en clave autonómica. Si ponemos la antena para emitir películas americanas sólo reproduciremos el discurso y la matriz global. Sólo haremos Andalucía creando programas andaluces. Hay que producir elementos claves de nuestra cultura andaluza y hacer programas con voluntad de permanencia, con un grado alto de dignidad que hoy la telebasura no tiene. P. Usted, profesor de periodistas, ¿hay diferencia entre su generación y la de la transición? R. La facultad en al que yo me eduqué estaba muy politizada. Era muy utópica. Todos los que vivimos el despertar de la democracia y la transición sufrimos en la parcela particular de los medios un desencanto con mucha más profundidad tal vez que en otros sectores sociales, porque de alguna manera nos sentíamos gestores de todo lo que ha ido sucediendo. Los alumnos de ahora se quieren formar mucho más, son conscientes de que su entrada en el mundo laboral pasa por saber varios idiomas, asistir a masters y tratar de hacer prácticas. Desde el punto de vista ideológico son menos combativos. Me parece muy sana la mentalidad de esta gente que se mete en el mundo de la comunicación. Yo apuesto decididamente por la gente nueva. Me parece que está mejor preparada. P. ¿Y cree que la universidad sabe canalizar esa capacidad? R. Hay quien opina que o cambian las facultades o tenemos que buscar un sistema de formación distinto. Pero ése es un problema global no sólo andaluz. Van a tender cada vez más a saber relaccionar las demandas de los públicos con la creación de mensajes. Es decir producir técnicos mucho más interactivos, periodistas que puedan trabajar con asistente y recibir miles de correos electrónicos que le prmiten saber qué interesa al público. Esos nuevos paradigmas de la comunidad hay que introducirlos en el sistema educativa. Pero las universidades son lentas y a veces las ciencias de la información aparecen bajo sospecha.

"La única manera de crear medios en clave autonómica es producir en clave autonómica"

Bernardo Díaz Nosty Nacido en Valladolid en 1946, es catedrático de periodismo de la facultad de Ciencias de la Información de Málaga. Es consejero de la RTVA y miembro del Foro Andalucía Siglo XXI.