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FUTBOL / Octava jornada de Liga

Los rojiblancos cometieron la mitad de faltas que el Alavés

El Alavés cometió ayer 26 faltas. El Atlético, sólo 12. Y sin embargo ganó 3-0. En el Extremadura-Real Madrid, el equipo blanco ganaba por la misma diferencia al final de la primera parte (0-3), y había cometido también menos faltas que su rival (9 frente a 10). Estos datos dejan en entredicho la tesis según la cual la victoria guarda relación con la agresividad en el juego.

El Atlético podía mantener esa hipótesis hasta ayer con datos. Su director general, Miguel Ángel Gil Marín, hizo unas declaraciones el miércoles en las que arengaba a sus jugadores a cometer faltas: "Tuvo que entrar Mena en el minuto 80 para que hiciéramos la primera falta (...) Hay que saber leer los partidos y saber cuándo hay que dar patadas (...)". Y en efecto, hasta ese día al Atlético le iba mejor en los encuentros en que los árbitros le sancionaban más.

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Excepto ayer, siempre que ha cometido menos infracciones que su rival, ha perdido; cuando se impuso en este apartado, obtuvo un resultado positivo. Y, efectivamente, si en algún encuentro flojeó por este lado fue en el del estadio Luis Sitjar, frente al Mallorca: tan sólo 12 faltas, cuando su media era de 18,57 por partido.

Mena

También atinó el director general rojiblanco cuando señaló a Mena como el gran especialista en este dudoso arte: 17 faltas (en 6 partidos). Pero Njegus (12, en 6 partidos, 11 de ellas como visitante) y Serena (13, en 7 encuentros) tampoco se habían quedado cortos. Kiko (20 faltas recibidas) ha sido el futbolista más castigado.El Atlético se ha mostrado más agresivo en casa (un promedio de 23,3 infracciones) que fuera (15 faltas). Y ha sido objeto de menos faltas en el Calderón (14,66) que en sus citas a domicilio (18). En Valencia, donde perdió 1-0, cometió 16 y recibió 18; en Montjuïc (1-1), hizo una más que el Espanyol (16 por 15). Sus dos derrotas más abultadas (en Oviedo, 3-1, y Mallorca, 4-0), coinciden con las dos citas en las que peor parado salió en el balance de faltas: en el Tartiere cometió 16 y recibió 22; en el Luis Sitjar, 12 frente a 17.

Por el contrario, cuando dominó el capítulo de faltas, el marcador se lo premió: frente al Salamanca (2-0), cometió 19 y recibió 18; ante la Real (4-1), hizo 23 y le hicieron 14; y contra el Tenerife (2-0), el árbitro le marcó al Atlético 28 por sólo 12 a su rival.

En el encuentro de ayer, el Alavés hizo el doble de faltas de las que suele recibir el Atlético como promedio en el Calderón (26 frente a 14,66); un solo jugador rojiblanco, Lardín, recibió siete faltas, casi un tercio de las cometidas por el Alavés. Le siguió Valerón, con seis sufridas. Y el tercero más castigado resultó ser Toni, con tres.

Ningún rojiblanco hizo más de dos faltas, pero ese número bastó para que Jugovic fuera expulsado por dos tarjetas amarillas. En el Alavés, Gerard cometió siete y tuvo más suerte.

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