La poesía y narrativa de dos jóvenes escritores y un ensayo experimental ganan los Premis Octubre El poeta valenciano Josep Porcar, y los catalanes Josep Pujol y Carles Hac son los ganadores

Los Premis Octubre que se concedieron anoche respaldan con su fallo a la nueva generación de poetas valencianos personalizada en el castellonense Josep Porcar, de 25 años, y en su obra La culpa. El jurado del premio de narrativa apostó también por la nueva narrativa, esta vez procedente de Girona, al distinguir la novela de título provisional Adolescents amb tatuatges, de Josep Pujol, de 34 años. Pero es Despintura del jo, el ensayo de Carles Hac Mor, de 57 años, autor de varios poemarios y especialista en arte, la propuesta literaria premiada más insólita y con mayor carga experimental.

Carles Hac Mor, de Lleida, comentó ayer que sus planteamientos artísticos coinciden mucho con los del compositor y artista de vanguardia Carles Santos, su amigo y compañero de generación. Su ensayo, subtitulado Ençà i enllà de Blaise Pascal i Antonin Artaud, propone un diálogo entre el científico y pensador francés del siglo XVII, de profundas creencias religiosas, y del escritor francés surrealista y precursor del teatro de la crueldad que murió en 1948 tras ser internado en un manicomio. Dos personalidades cuyas trayectorias vitales y formas de pensar se sitúan en las antípodas, justo lo que buscaba el escritor leridano para desarrollar su ejercicio de estilo que bebe de las fuentes de Montaigne, Fuster, de Derrida y del textualismo francés, según comentó ayer el autor horas después de conocer el fallo del jurado. Hermano del guionista de cine Gustavo Hernández, Carles Hac Mor (nombre artístico) señaló la posible ruptura de su obra, "de pensamiento abstracto", con la línea de los ensayos galardonados en los Premis Octubre que tratan aspectos del nacionalismo o de la literatura catalana. En este sentido, calificó su libro de "insólito" y aventuró que podría tratarse de un "punto de inflexión" en los premios que organizan la editorial Tres i Quatre y la Fundación Ausiàs March y que en el apartado de poseía está dotado con un millón de pesetas. El autor, residente en Barcelona, rechazó que la carencia de puntos y aparte en Despintura del jo dificulte su lectura. "Parece un poema narrativo de 150 páginas", apuntó en alusión al comentario de un miembro del jurado. Poemas son, sin duda, las composiciones con las que el joven valenciano Josep Porcar ha ganado las 500.000 pesetas del Premi Andrés Estellés gracias a su obra La culpa. Periodista del diario Levante de Castellón, Porcar ya concursó con 18 años en los Octubre y ayer relató la emoción que experimentó cuando recibió un voto. A tenor de los cuatro poemarios que ya ha publicado a pesar de su juventud y de la gran actividad literaria tanto en las tertulias de Valencia, cuando era estudiante, o en los recitales que organiza por poblaciones de Castellón, Porcar es uno de los poetas de su generación más significativos y de más calidad de la literatura catalana. Un juicio que refrendó ayer un miembro del jurado. Precisamente, Porcar reconoció la existencia de un generación de poetas jóvenes valencianos entre los que citó a Joan Ignasi Granero y Vicente Nácher, y podría haber incluido a Àlex Navarro o Julia Sabala. En el libro premiado habla del sentimiento de culpa que se adquiere a medida que uno crece y se van perdiendo sentimientos originales, en un proceso que va "petrificando" a la persona hasta convertirla en una "estátua que camina". En La culpa, Porcar reivindica también la ironía y la tradición de la sátira valenciana a partir de la adaptación moderna de unos textos de David de la Biblia. El salvadoreño Roque Dalton, Mario Benedetti, Marc Granell y Cesare Pavese son algunos de los principales poetas que influyen en su poesía. El profesor de música y escritor Josep Pujol, por su parte, se ha basado en los chats de Internet para escribir una novela que le ha valido el Premi Andròmina, dotado con dos millones de pesetas. "La gente que se conoce sólo a través de las palabras me parece un tema muy literario", comentó ayer el autor del libro cuyo argumento gira en torno a un adolescente y sus obsesiones, aunque también juegan un papel narrativo importante los personajes que con "30 o 40 años" aún no se conocen a sí mismos. Pujol, que cuenta con varios libros publicados, negó que sus inquietudes literarias vayan por el mismo camino que la joven narrativa española actual de lenguaje coloquial y temática urbana, tipo Historias del Kronen.