Los partidos de Navarra se oponen a una paz sujeta a la unión a Euskadi
La continuidad de la tregua de ETA y la entrega final de sus armas no puede estar condicionada a una negociación en la que se comprometa la modificación del status institucional actual de Navarra ni sus relaciones con otras comunidades autónomas. Este claro mensaje vertebra la resolución política firmada ayer por los tres principales partidos de la Comunidad Foral y que el Parlamento navarro aprobará la próxima semana en un debate sobre el futuro de la región.Los 38 votos de UPN-PP, PSN-PSOE y Convergencia de Demócratas de Navarra (CDN), en una Cámara de 50 escaños, garantizan una mayoría absoluta para este pronunciamiento. Regionalistas, socialistas y convergentes coinciden en reconocer que una "actitud constructora" de la paz debe implicar a todos los grupos políticos representados en el Parlamento, incluyendo a HB, mediante la plena aceptación del sistema democrático y de sus reglas, sin amenazas ni coacciones. No obstante, HB rechazó ayer en un comunicado esta propuesta porque "supone un intento de obstaculizar el proceso de paz".
De las negociaciones de las tres primeras fuerzas políticas navarras ha surgido un manifiesto en el que se deja claro que "sólo el pueblo navarro y las instituciones forales que le representan pueden tomar decisiones que afecten a Navarra". El texto reconoce "el derecho de todos los grupos políticos navarros a defender cualquier proyecto acerca de la identidad y el modelo político-institucional de Navarra, siempre que se haga por métodos democráticos".
Los firmantes exigen que estos planteamientos estén presentes en cuantos foros se creen para la pacificación. Socialistas y regionalistas sólo apoyarán esta resolución.
