El órgano disciplinario del CGPJ quiere dejar en multa la sanción al juez Navarro

La comisión disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que estudió ayer los cuatro expedientes sancionadores incoados al juez Joaquín Navarro Estevan, redujo las propuestas para que se le expulse de la carrera judicial por un período de hasta un año y medio a sanciones pecuniarias poco menos que simbólicas y que totalizan 600.000 pesetas en multas. La propuesta de la comisión, que rebaja sustancialmente las formuladas por el instructor del expediente y el fiscal, puede ser rechazada por el Pleno del Consejo.

La comisión disciplinaria no apreció ninguna falta en el hecho de que en un artículo publicado en El Mundo, titulado Cainismo y prevaricación, el juez Joaquín Navarro arremetiese contra el juez Baltasar Garzón por haber aceptado la recusación del juez Javier Gómez de Liaño en el caso Sogecable. Del artículo se deducía que el propio Navarro se había interesado y había aconsejado a Garzón en el asunto al escribir: "Todo esto se lo dijimos... y yo mismo... a las pocas horas de presentada la recusación". Donde el magistrado del Tribunal Supremo e instructor delegado de las actuaciones, Xavier O´Callaghan, y el ministerio fiscal apreciaron una "falta grave por interesarse mediante recomendación en la actividad de otro juez" y por la que el primero proponía 250.000 pesetas de multa y el fiscal 200.000 pesetas, la comisión entiende que no hay motivos suficientes para tomar ninguna medida disciplinaria contra Navarro. El portavoz del CGPJ, Benigno Varela, explicó que en este caso se le ha aplicado al juez el principio in dubio pro reo (en caso de duda, fállese a favor del reo) porque "se carecían de elementos suficientes para una sanción".

Desconsideración

En un segundo artículo de Navarro, titulado Panorama desde el puente, el juez arremetía contra el presidente de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, José Jiménez Villarejo, al que calificaba de "viejo padre Peyton, que alienta el fervor de la jauría". La comisión aprecia una falta leve de "desconsideración", por la que propone una multa de 50.000 pesetas donde el fiscal apreciaba una grave falta de respeto por la que pedía una multa de 200.000 pesetas. En un tercer artículo, titulado Bula de oro para un prócer, Navarro se entrometió en el caso Liaño que se seguía en la Sala Segunda del Tribunal Supremo. "Que acaba de una vez ese espantajo judicial entenebrecido por el prejuicio, el odio y la sumisión de unos y otros, impuesto por la bula de oro de un oligarca de tres al cuarto", decía en un artículo que motivó una protesta oficial del presidente de la Sala Segunda por los términos con que Navarro calificó a tres magistrados de la Sala Segunda.

El instructor del expediente propuso un año y medio de suspensión de Navarro en sus funciones judiciales por una "falta muy grave" y el fiscal, la suspensión por un año por dicha falta.

Sorprendentemente, la comisión ha reducido la falta a "grave" y ha propuesto una sanción de 500.000 pesetas de multa. La comisión también reduce de falta "grave" a "leve" y de 250.000 a 50.000 pesetas otra propuesta por un escrito de Navarro al servicio de Inspección del Consejo del Poder Judicial en el que calificaba a éste de "instrumento inquisitorial al servicio de pretensiones de amedrentamiento o humillación de magistrados y jueces". Añadía Navarro: "En mi caso la amenaza se ha consumado. Es intolerable".

La propuesta de la comisión, por su distancia de la del instructor y el fiscal no será sometida al pleno de hoy del organismo, sino a otro posterior.