Los pilotos afirman que la tercera pista no podrá asumir las 75 operaciones a la hora
El sindicato de pilotos (SEPLA) denunció ayer que parte de las trayectorias aéreas incluidas en el nuevo Plan Aéreo de Barajas fueron suspendidas el mismo día en que entraban en vigor por ser "inviables y comprometer la seguridad de los vuelos". Y que con el nuevo espacio aéreo es imposible cumplir las previsiones: 75 operaciones a la hora. Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) desmiente categóricamente las afirmaciones de los pilotos: no se han modificado las rutas y será posible alcanzar las 75 operaciones con la tercera pista.
El SEPLA amplió ayer sus denuncias y acusó ayer a AENA y a la Administración de no respetar los acuerdos sobre protección acústica medioambiental firmados con los ayuntamientos próximos al aeródromo. Del mismo modo denunció que dos de las nuevas rutas aéreas de salida, la del sur y la del noroeste, fueron canceladas temporalmente el mismo día de su entrada en funcionamiento ante los problemas de seguridad que entrañaba su cumplimiento.Según el sindicato de pilotos, las trayectorias de salida por el noroeste, destinada a naves de gran tonelaje, fueron canceladas ante el riesgo que éstas suponían para los aviones. "La configuración de esta ruta obligaba a los aviones a volar muy bajo, con las consiguientes molestias para los pueblos colindantes al aeropuerto", señaló Juan Carlos Lázaro Aparicio, del comité técnico del SEPLA.
La segunda ruta cancelada, la del sur, obligaba a las aeronaves a que, nada más despegar, se situasen en un rumbo que, según los acuerdos internacionales, no puede ser alcanzado antes de los 150 metros de altura. "De ahí que los pilotos nos opusiéramos a esta nueva ruta y fuese anulada en el último momento por AENA", aseguró Lázaro Aparicio.
Por otro lado, los miembros del SEPLA insistieron en la imposibilidad de que la tercera pista, que se inaugurará en noviembre, consiga aumentar la capacidad de Barajas hasta 75 operaciones a la hora, como anunció AENA. "Los movimientos de entrada y salida en el aeropuerto se han diseñado de un modo tan rígido y tan encorsetado que será imposible alcanzar las 75 operaciones a la hora que prevé AENA", aseguró Lázaro.
En opinión del sindicato de pilotos, el fracaso del novedoso diseño aéreo es fruto de la falta de un estudio práctico que evalúe los niveles de ruido y la calidad de los trayectos de vuelo. "No se pueden hacer estudios con un ordenador sin tener en cuenta variables como el tipo de avión o las condiciones meteorológicas a las que se enfrentan los operativos. Si hubiesen consultado a los pilotos, que en definitiva son los que vuelan, no tendríamos que solucionar los problemas a los que ahora nos enfrentamos".
La Administración aprobó en septiembre un proyecto ley que sancionaba a los vuelos en cas ode que se desviaran una sóla milla de su ruta.
El valor de una milla
La intención de esta iniciativa era obligar a los pilotos a respetar sus caminos para que el ruido no afectase a los pueblos cercanos. Para el SEPLA, este proyecto de ley es inutil, "ya que la mayoría de los aviones carecen del equipamiento de navegación necesario para respetar un valor tan pequeño como el de una milla". El sindicato de pilotos se lamentó de que sean ellos los que siempre acaban pagando la falta de planificación de la Administración. Por su parte, AENA desmintió ayer las acusaciones de los pilotos y mantuvo que se podrán ejecutar 75 operaciones a la hora. El organismo público aseguró que el espacio aéreo no ha sido modificado desde que entró en funcionamiento, "por estar configurado por cartas de navegación y red de ayudas que hacen imposible su alteración". No obstante, AENA reconoció que, al estar basadas parte de las nuevas rutas en las antiguas, existe la posibilidad de alterarlas en virtud del peso y el volumen de los aviones". Además advirtió que "en cualquier trayecto siempre existe cierto dinamismo para modificar parcialmente las rutas".
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