El PNV quiere que PSOE y PP no se vean marginados en el proceso de paz

El PNV avanzó ayer un paso más en su estrategia de pacificación y ofreció al PP y al PSOE su respaldo para que, con discreción y sin necesidad de abrir un debate público, ninguno de los dos partidos se sienta marginado y así puedan incorporarse al proceso de paz al ritmo que deseen. "Lo que tenemos que dar es cobertura, especialmente al PSOE y al PP, para que se incorporen al proceso de paz", dijo el candidato peneuvista a lehendakari, Juan José Ibarretxe.

Fuentes próximas al actual vicepresidente del Gobierno vasco indicaron que esa "cobertura política" al PP y PSOE podría llegar incluso a dejar intactas sus relaciones institucionales, tanto en Euskadi con el PSE, como con el PP en el Congreso de los Diputados.El PNV sólo espera del PSE su deseo de formar parte del próximo Gabinete de coalición que saldrá de las elecciones. "Tienen que querer", indicaron las mismas fuentes. Ibarretxe saludó las declaraciones del secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, en las que mostraba su deseo de que el PSE forme parte del próximo gabinete vasco de coalición.

Pese a esta oferta clara a los dos grandes partidos de ámbito estatal para que puedan integrarse en el proceso de paz abierto tras el alto el fuego de ETA, Ibarretxe también advirtió a ambas formaciones de que deberían tener muy claro que "todas las ideas son defendibles por medios democráticos y que, incluso, las estructuras jurídico-políticas, si es preciso, deberán adaptarse a la voluntad de una sociedad moderna".

Tras el anuncio de que una vez instalado en Ajuria Enea, si el PNV gana los comicios, como es previsible, Ibarretxe llamará a todos los partidos, incluido HB, a un diálogo sin límites, la oferta a PP y PSOE supone un paso más en la configuración de esa futura mesa de conversaciones.

En estas circunstancias, está absolutamente claro que el Gobierno vasco está dispuesto a ser el que lidere la política de pacificación. Desde la propia campaña electoral, el candidato a lehendakari del PNV ha asumido la función de impulsor de un instrumento que sirva para consolidar la paz y que podría no coincidir con la actual Mesa de Ajuria Enea. En opinión de Ibarretxe, "los instrumentos son válidos en función de los objetivos" que consigan. Además, sería difícilmente asumible para HB incorporarse a un foro que ha combatido durante una década.

Discreción

El PNV está intentando hacer una campaña sin entrar en la descalificación. Un hecho que para Ibarretxe es fundamental, aunque reconoció que no es fácil para algunos miembros de su partido. "Nos están acusando de todo y nos están llamando de todo", dijo.En ese sentido, el aspirante peneuvista a Ajuria Enea evitó hacer valoración alguna sobre el previsible traslado a cárceles vascas de los presos enfermos de ETA que el Gobierno central está dispuesto a poner en marcha antes de las elecciones autonómicas. "Cada uno sabe lo que tienen que hacer, y a veces se hace lo que se puede", declaró Ibarretxe. "De la misma manera que es imposible pensar que HB va a estar en el Gobierno vasco, es imposible pensar que en el PP pueden cambiar las cosas en dos días", apostillaron fuentes próximas a la vicepresidencia.

Tampoco quiso polemizar sobre la fórmula para integrar a los partidos navarros en el proceso de pacificación. "Los ciudadanos de Comunidad Foral serán lo que quieran ser los navarros y navarras, como no puede ser de otra manera", explicó.

En referencia a las acusaciones de que con esta propuesta había firmado el certificado de defunción de la Mesa de Ajuria Enea, Ibarretxe lamentó que en este país "se hable mucho de los instrumentos y no de los fines".