FIN DEL DESTIERRO DE BOTERO
Un cuadro del artista colombiano Fernando Botero de una monja regordeta, conocido como Madre superiora, que fue desterrado de la sede presidencial en Bogotá por el Gobierno de Ernesto Samper, volvió a ser colgado en las paredes de la residencia de los jefes de Estado colombianos por orden del actual mandatario, Andrés Pastrana. La obra fue descolgada de la sala en donde se encontraba en la Casa de Nariño, sede de los presidentes de la nación, por orden expresa del anterior gobernante, según informó la prensa local. Samper, muy molesto por las afirmaciones de quien fuera su ministro de Defensa, Fernando Botero Zea, hijo del pintor, que aseguró que el mandatario sí sabía del ingreso de dinero procedente del narcotráfico de Cali para su campaña presidencial en 1994, ordenó enviar el óleo a un almacén. La obra, que finalmente fue entregada al Museo Nacional a petición del pintor tras enterarse de lo sucedido en la sede presidencial, volvió el pasado viernes, a la Casa de Nariño. El lienzo entró por primera vez en su actual domicilio en 1982, cuando era presidente de Colombia Belisario Betancur.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.