El STEPV afirma que el decreto de la inspección creará "cortijos"

En vez de un servicio para el asesoramiento y la mejora de la enseñanza pública, el proyecto de decreto sobre la organización y el funcionamiento de la inspección educativa del Gobierno Valenciano "parece que pretende organizar "cortijos"". Ésta es la valoración que el sindicato mayoritario de la enseñanza no universitaria, STEPV, hace de un decreto que, según fuentes oficiales ha sido elaborado por el subsecretario de Educación, Carlos Alcalde, y varios funcionarios de la inspección. "El decreto no apuesta al futuro, no está en consonancia con los principios de la LOGSE y atenta contra los principios de mobilidad del cuerpo de funcionarios de la inspección y desconoce la posibilidad de la formación y recalificación profesional", precisaron ayer fuentes del sindicato. Las razones esgrimidas por el sindicato al criticar con dureza el proyecto se basan fundamentalmente en "la concepción conservadora que la Administración actual tiene de la inspección". El STEPV justifica su rechazo -el mismo que ya ha manifestado la ADIDE (Asociación de Inspectores)- con datos de mayor calado. Según la central la normativa favorece que un 12,8% de las plazas "estén reservadas a la más absoluta discrecionalidad".