Trabajadores de Buñol dicen que el horno de aceite daña su salud

Los trabajadores de varias empresas ubicadas en el polígono industrial El Llano de Buñol han alertado sobre la contaminación y los perjuicios que la incineradora de aceites usados Aureval, SL, está ocasionándoles "en sus instalaciones y organismos", según ha explicado la Secretaria General de CC OO de la intercomarcal de La Hoya de Buñol y Utiel-Requena, María Villar. La representante sindical ha indicado que "son los trabajadores de varias empresas próximas, en concreto una de pulido de mármoles, un taller mecánico y otra dedicada a la construcción de prefabricados de hormigón (Prevalesa), con más de doscientos trabajadores, los que han mostrado su preocupación por las emisiones contaminantes y los perjuicios que la incineradora les puede estar ocasionando en su salud". Especialmente grave es la situación de la empresa Trading Plastics, SL, ubicada justo al lado de la planta incineradora, donde sus empleados han amenazado con dejar sus puestos de trabajo si no se acaba con las "increíbles condiciones que tienen que soportar debido a la incineradora, que ni siquiera les permite respirar y les produce dolores de cabeza, que les impiden, incluso, realizar ningún esfuerzo físico. De hecho, el trabajo fuera de las instalaciones de la empresa tienen que hacerlo con mascarilla porque las condiciones son inaguantables", ha añadido Villar. Dolores de cabeza El concejal de Interior del Ayuntamiento de Buñol, Juan Lavarías, ha indicado que en los últimos meses se han presentado cuatro denuncias contra Aureval por parte del gerente de la empresa Trading Plastics, SL, "cada una de ellas por diferentes cuestiones". La primera de ellas, según explica el concejal, "por la emisión de una serie de partículas incandescentes que están cayendo en la zona de la empresa que representan un peligro para sus instalaciones y el material almacenado, plásticos y PVC, con el consiguiente peligro de incendio y riesgo ecológico". En la segunda de ellas "los trabajadores, con nombres y apellidos, manifiestan sufrir molestias en el organismo y dolores de cabeza, afirmando que están dispuestos a marcharse de la empresa si inmediatamente no se buscan soluciones a este problema. Las olores son insoportables para el olfato humano, entran ganas de vomitar, es un olor que se agarra a la nariz y muy desagradable", añade el edil. En la tercera de las denuncias se hace referencia a "la precipitación de gotas de partículas de aceite que incluso están acabando con la vegetación de la zona". Y la última de las denuncias afecta "al ruido insoportable al que se encuentran sometidos los trabajadores, acompañado de vibraciones constantes en las instalaciones". Según ha afirmado Lavarías, "todos estos hechos han sido comprobados y verificados por la policía local". Por su parte, la responsable sindical ha recalcado que el lunes tiene previsto registrar la correspondiente denuncia ante el servicio de la policía autonómica.