Garzón deja libres bajo fianza a un consejero y una periodista de "Egin"

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón dejó ayer en libertad bajo fianza de 25 millones a Jesús María Zalacaín, consejero de Orain, sociedad editora del diario Egin, y bajo fianza de un millón de pesetas a la subdirectora del rotativo, Teresa Toda Iglesia, por delito de integración en la banda terrorista ETA. Simpatizantes del desaparecido rotativo congregados frente a la Audiencia Nacional despidieron al juez Garzón con gritos de "Egin, askatu (libertad)" cuando abandonaba el edificio.

Garzón también tomó declaración al ex miembro de la Mesa Nacional de Herri Batasuna José Luis Elkoro, que cumple una condena de siete años de prisión por colaboración con ETA. El juez decretó para él la libertad sin fianza en el sumario de Egin, pero Elkoro seguirá cumpliendo la pena que se le impuso en el proceso a la Mesa Nacional de HB.Jesús María Zalacaín y Teresa Toda salieron en libertad porque el juez les ha dado un plazo de cuatro días para hacer efectivas las fianzas. En sendos autos dictados por Garzón al término de las comparecencias, el juez reitera sus argumentos de que Orain, la editora de Egin, y la emisora de radio Egin Irratia, además de otras empresas vinculadas a las anteriores y que han sido clausuradas, eran un instrumento de ETA.

Garzón imputó a Zalacaín, como integrante del consejo de administración de Orain S.A., los delitos de pertenencia a banda armada, alzamiento de bienes, blanqueo de capitales y delito fiscal, mientras que a la periodista Teresa Toda la acusa únicamente de pertenencia a banda armada.

Las acusaciones formuladas contra Jesús María Zalacaín son las mismas que pesan contra otros miembros del consejo de administración de la editorial Orain, por actividades llevadas a cabo dentro de la "dinámica delictiva" de ETA.

En cambio, a la periodista Teresa Toda la acusa de pertenecer a ETA a raíz de una entrevista que mantuvo en 1992 con el dirigente etarra José Luis Álvarez Santacristina, Txelis, a la que asistió cuando era redactora jefe de Egin con el después director Javier Salutregi y el consejero delegado de Orain, Ramón Uranga.

Garzón recuerda que dicha entrevista con Txelis "nunca se publicó, como hubiera sido lógico, informando a todos los lectores de esa gran exclusiva". Sólo tras la caída de la cúpula de ETA en Bidart y la detención de Txelis se publicó un cuestionario "sin añadidos ni eliminaciones", remitido por el etarra desde la prisión francesa donde llevaba seis meses.

A ambos imputados el juez les ha impuesto, además de las fianzas, la obligación de comparecer ante la Justicia cada semana y la prohibición de abandonar el territorio nacional.

A su salida de la Audiencia Nacional, Teresa Toda calificó de "alucinante" que se le acuse de pertenencia a ETA cuando, dijo, "todos los redactores del Egin hemos desempeñado una labor periodística".

Por su parte, Jesús María Zalacaín, quien también es periodista y profesor de la Facultad de Ciencias de la Información de Lejona, dijo que el caso que instruye Garzón es una "farsa jurídica" y que sólo el juez sabrá por qué "ha montado esta película".

Garzón investiga la trama financiera de ETA en unas diligencias en las que acordó el pasado mes de julio la clausura del diario Egin y de la emisora Egin Irratia, e intervino otras empresas como Ardatza y Hernani Imprimategia, así como la editora de Egin, Orain S.A.

Hasta la fecha, el juez de la Audiencia Nacional ha decretado el ingreso en prisión de ocho imputados en este sumario, mientras que otros seis han quedado en libertad con fianza y uno sin fianza, según datos facilitados por los abogados.