El Ayuntamiento de Jaén vende 237 viviendas en el centro de la ciudad a tres millones de pesetas cada una

El pleno del Ayuntamiento de Jaén aprobó ayer con los 15 votos a favor del Partido Popular, cuatro abstenciones de Izquierda Unida y ocho votos en contra del PSOE la enajenación de 237 viviendas de protección oficial en el centro de la capital. Se trata de dos bloques de pisos construidos hace cinco décadas que los jiennenses conocen como Las Protegidas. El precio que ha fijado el PP para cada una estas casas es de unos tres millones de pesetas, tomando como referencia el valor catastral de los edificios. Tanto Izquierda Unida como el PSOE coincidieron en defender el derecho de los vecinos a la adquisición de las casas en las que, en algunos casos, llevan habitando casi medio siglo. De hecho, los inquilinos están, mayoritariamente, de acuerdo con la oferta municipal, puesto que llevan varios años demandando la enajenación. El voto negativo del PSOE se debe a que se trata de "una propuesta disparatada y posiblemente ilegal", según dijo el portavoz municipal socialista, Juan Torres. Este grupo justificó la ilegalidad en tres puntos y pidió que se eliminarán del acuerdo. El primero es que se suprima el periodo de diez años sin que puedan vender, es decir, que no se obligue a los vecinos que quieran deshacerse de la vivienda a aguardar toda una década antes de poder hacerlo. El segundo se centra en que no se les cargue con el costo del arreglo de los inmuebles, ya que a los tres millones de la venta deben sumar la actuación de mejora que se ha realizado en los últimos tiempos en el inmueble. Y por último, que se elimine el requisito que indica que para adquirir la casa que habitan, el inquilino debe acreditar que no dispone de ninguna otra vivienda. Por su parte, IU se abstuvo porque fue rechazada su enmienda en la que se solicitaba que el Ayuntamiento no renunciase a los derechos urbanísticos de la zona, ya que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) prevé elevar hasta dos pisos más la altura de ambos edificios, lo que indica que si el Consistorio no renunciara a sus derechos urbanísticos podría percibir entre 500 y 1000 millones en los próximos años. El PP entendió que esta postura perjudicaría a los vecinos que quedan como dueños de los bloques, lo que les permitirá, si deciden ampliar la construcción, obtener un negocio en una de las zonas mejor comunicadas de la capital, a juicio de IU. Los dos grupos de la oposición coincidieron al proyectar una imagen despilfarradora del Ayuntamiento jiennense.