Las 35 horas, un gol al PP

La Consejería de Trabajo e Industria presenta esta semana su proyecto de aplicación en Andalucía de la jornada de 35 horas semanales. Los sindicatos mayoritarios parece que han acogido favorablemente esta iniciativa, aunque está por ver qué contrapartidas ofrecen, una respuesta que sin duda ha de pasar por un incremento de la productividad. La patronal, en principio, es poco dada a aceptar una propuesta que interpreta más que todo como una amenaza para la creación de empleo. Una posición escéptica que comparte con el Partido Popular, formación que se ha visto así desbordada por una sorprendente jugada del Gobierno de Manuel Chaves en el inicio del curso político. Pendientes aún de que el Ejecutivo central se decida a transferir de una vez por todas las políticas activas de empleo, el ministro de Trabajo, Javier Arenas, incrementará su presencia en esta tierra para completar su "triunfal recorrido" por los distintos pueblos. Es la Andalucía rural, verdadera asignatura pendiente de los populares y que pretenden resolver a fuerza de inaugurar escuelas taller y casas de oficios. Pero, en materia de empleo, esta semana el punto caliente estará de nuevo en Cárnicas Molina. Pende sobre el futuro de esta empresa jiennense, aún en manos del IFA, la aprobación o no por parte de la Unión Europea de las ayudas que en su día prestaron la Junta de Andalucía, fundamentalmente, y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Todo indica que se producirá el rechazo de las autoridades comunitarias, con lo que la multa de 10.000 millones de pesetas será inevitable y, por tanto, la quiebra de la entidad, que está a punto de ser vendida a Campofrío. Sin consenso Será, cuanto menos, curioso, observar la reacción de las distintas fuerzas políticas en relación a este asunto. Sin duda que el consenso para lograr lo mejor para los 500 trabajadores que componen su plantilla brillará por su ausencia. Y es que el consenso en sí mismo, como instrumento de acuerdo, se ha convertido en un bien escaso en el debate político actual. Precisamente será éste uno de los aspectos claves de la conferencia inaugural que Alfonso Guerra pronunciará en la Universidad Internacional de Andalucía para celebrar así los 20 años de vida de nuestra Constitución. Entramos, por lo demás, en una semana en la que se volverá a repetir la foto del comité de enlace de PSOE y PA tras las vacaciones veraniegas. Nada hay en el horizonte que intranquilice la estabilidad de los socios de gobierno. Tan sólo las excentricidades de algún "cantonalista" que otro, poco dado al concepto universal del andalucismo y más, en cambio, al localismo a ultranza, adobado, eso sí, con las suficientes dosis de demagogia. Así que Manuel Chaves deberá iniciar su gira por el Cono Sur con tranquilidad y con la vista puesta en abrir las fronteras de América a las empresas andaluzas. Entraremos también en una fase decisiva para ir conociendo nuevas posturas sobre el proyecto del AVE a Málaga. El grupo parlamentario del PSOE propone este martes en el Senado instar al Gobierno central a que firme antes de un mes con la Junta el protocolo para realizar el proyecto y reclama 8.000 millones para el mismo. Los socialistas esperan que los populares apoyen su moción, pero queda por ver cuál será su respuesta, toda vez que, según anuncian, en los próximos Presupuestos Generales del Estado habrá propuestas concretas para esta iniciativa. También los populares esperan con interés a los socialistas en el Parlamento andaluz para que definan su postura sobre el complejo tema de la segregación de la Audiencia Provincial de Cádiz.