Redondo asegura que tras el 25-O nacionalistas y no nacionalistas tienen que lograr acuerdos
El secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, afirmó ayer ante el Comité Nacional de su partido que "este país no se construye sin zonas de consenso entre nacionalistas y no nacionalistas" y aseguró que tras el 25-O "debe haber acuerdos entre nacionalistas y no nacionalistas". El Comité Nacional aprobó las listas y el programa con el que el PSE concurrirá a los comicios. Redondo pidió de nuevo a los nacionalistas que aclaren a los electores si acatan la Constitución o si tienen un pie fuera de la legalidad y apoyan la autodeterminación.
El líder de los socialistas vascos garantizó en Bilbao que su formación mantiene la apuesta estratégica de intentar construir Euskadi sin exclusiones, con los partidos nacionalistas. Tras la salida del Gobierno vasco de los tres consejeros socialistas, en el mes de junio pasado, Redondo había remarcado en sus intervenciones públicas el perfil más partidista, elevando el listón para que el PSE se convierta de nuevo en una de los pivotes sobre los que se asiente la estabilidad institucional vasca, tanto en el Ejecutivo autónomo como en diputaciones y ayuntamientos. En la reunión del Comité Nacional, el secretario general del PSE-EE resituó a su partido en el centro de la gobernabilidad de Euskadi. Es cierto que Redondo Terreros precisó que con ese discurso no estaba "determinando las políticas de alianzas" de su partido tras los comicios, porque eso es algo que no tienen previsto cuestionarse hasta oír la voz del electorado. De hecho, fuentes de la dirección mantienen que la política de pactos tras el 25-O "debe mirar indefectiblemente a las elecciones de junio y a la estabilidad en ayuntamientos y diputaciones". Listas y programa El máximo órgano entre congresos de los socialistas vascos aprobó por unanimidad el programa electoral y dio su visto bueno por mayoría -134 votos a favor, 3 en contra y 15 abstenciones- a las candidaturas presentadas. A expensas del reflejo que pueda tener en las listas el acuerdo que presentarán hoy públicamente en la capital vizcaína Redondo y el secretario general del Partido Democrático de la Nueva Izquierda (PDNI), Diego López Garrido, el comité apoyó para los dos puestos de apertura las parejas Nicolás Redondo Terreros-Rosa Díez, en Vizcaya; Manuel Huertas-Jesús Eguiguren, en Guipúzcoa y Fernando Buesa-Carmen Asiain, en Álava. En principio, el pacto con Nueva Izquierda no tendrá ninguna repercusión significativa en las listas. Redondo Terreros reiteró que el programa que los socialistas presentan a las elecciones no es mera literatura, sino que "contiene muchos riesgos, muchas apuestas" y, sobre todo, "muchos compromisos". En algunas materias, los socialistas han llegado a cuantificar sus posibles ofertas, sobre todo las relacionadas con las políticas de desempleo y contra la exclusión social. Redondo destacó el hecho de que su partido haya "pacificado las relaciones" con los sindicatos UGT y Comisiones Obreras y defendió un acuerdo institucional y con los agentes sociales (empresarios y centrales) para rubricar un pacto social concreto con la defensa de la jornada de 35 horas, el reparto del empleo o el contrato de sustitución. El secretario general del PSE reiteró que Euskadi necesita un gran pacto cultural sin exclusiones y aseguró que "es imprescindible hacer ese debate con los nacionalistas". Redondo hincó el diente también en el espinoso asunto de la educación y acusó a los gestores de este departamento en el Gobierno (EA) de haber instrumentalizado las políticas educativas en detrimento de la realidad plural vasca y, sobre todo, de haber pasado por "encima de los consensos logrados" en la época de los consejeros socialistas José Ramón Recalde o, más recientemente, Fernando Buesa. En su intervención, el líder del PSE no dejó de aludir a la convulsión que viven los socialistas tras el encarcelamiento del ex ministro del Interior José Barrionuevo y el ex secreatrio de Estado para la Seguridad Rafael Vera por el caso Marey. "Lamentamos lo que sucedió", dijo, "pero eso no quita la solidaridad con dos personas que dicen que son inocentes".
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