Romero supera otro pulso de los que cuestionan su liderazgo y coloca al PSPV en dinámica preelectoral
Romero dió el pistoletazo de salida de la precampaña ayer en el comité nacional del PSPV, máximo órgano entre congresos. Una reunión de la cúpula socialista que estuvo centrada en cuestiones internas y de la que Romero salió reforzado, con el apoyo del lermismo moderado, de un nuevo pulso lanzado por los críticos -una amalgama de ciscaristas, asuncionistas e IS- que cuestionaban su liderazgo. Romero, que se quejó de que siempre hay alguien empeñado en hablar de cuestiones internas en vez del proyecto socialista, expuso ayer los ejes del que será su programa electoral no sin antes preguntarse: "¿Cuántas votaciones tendré que superar para sentirme el secretario y el candidato de todos mis compañeros?".
El secretario general del PSPV, Joan Romero, resistió ayer el cuarto embite consecutivo planteado por sus críticos -desde el 8º congreso celebrado en Valencia- y salió reforzado de un comité nacional, el máximo órgano entre congresos, que se había planificado para debilitarle. La propuesta de resolución presentada por los seguidores del secretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, del ex ministro Antoni Asunción, de la corriente Izquierda Socialista y de la ex candidata de primarias Clementina Ródenas, tendente a demostrar que Romero estaba en minoría no llegó ni siquiera a someterse a discusión. Con 103 votos en contra de su inclusión en el orden del día, 75 a favor y 5 abstenciones decayó un texto en el que se criticaba al secretario general y con el que se le pretendían imponer condiciones. Esta votación, que el propio comité nacional decidió que no sería secreta -aunque Romero se pronunció a favor de que lo fuese-, demostró que los fieles del secretario federal del Empleo del PSOE, Joan Lerma, están ahora junto al secretario general y candidato. El comité nacional también sirvió para comprobar que los de Ciscar mantienen su oposición frontal a Romero, mientras que Izquierda Socialista y los seguidores de Asunción -aliados del secretario general hasta el proceso de primarias celebrado el pasado mes de julio- recibieron un duro varapalo y tendrán que decidir cómo se reposicionan tras la celebración del comité nacional. El dirigente de Izquierda Socialista Vicent Garcés fue el único dirigente de la plataforma crítica que defendió personalmente sus posiciones. Garcés esgrimió la versión de que no había "ni vencedores ni vencidos" porque la propuesta de resolución no se había llegado a discutir. En su intervención incluso llegó a afirmar que el secretario general se había quedado en minoría por que se había pronunciado a favor de que la votación fuese secreta. Una afirmación que fue recibida con estupor por los integrantes del comité nacional. En cualquier caso IS tendrá que revisar su teórico papel de bisagra en la conformación de una mayoría y decidir si forma parte de ésta o vuelve a ser minoría de la minoría. En su réplica, Romero mantuvo su discurso integrador y dejó la puerta abierta a sus hasta ahora aliados asuncionistas e Izquierda Socialista, aunque falta por conocer cómo concretará el dirigente socialista su disposición al diálogo. El debate también tuvo una consecuencia inmediata para los secretarios comarcales de Ports-Maestrat y Marina Baixa, ya cuestionados por sus bases, que salen debilitados del pulso planteado a Romero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.