Peres asegura que la mayoría de los israelíes apoya un Estado palestino

Con cifras en la mano, el exprimer ministro israelí Simón Peres afirmó ayer que "la mayoría de la sociedad israelí [53%] apoya la creación de un Estado palestino independiente". Para Peres no existe otra alternativa posible por lo que considera que hay que ayudar al "establecimiento de un Estado palestino ya que no es deseable un estado multiétnico sino dos Estados, para que no suceda lo que se ha vivido en Bosnia".Simón Peres, creador junto a Yasir Arafat y el asesinado Isaac Rabin del proceso de paz en Oriente Próximo -por el que ambos ganaron el Nobel en 1994- aseguró que no se oyen voces de guerra en Israel. "Tan sólo hay una falta de confianza mutua pero finalmente siempre es preferible pagar el precio de la paz que el coste de la guerra", afirmó tajante.

Cinco años después de la firma de los acuerdos de Oslo sobre la Autonomía Palestina, Peres asegura que "Oslo no está muerto porque allí ocurrieron algunas cosas que ya son irreversibles". "Los palestinos tuvieron, por primera vez, un interlocutor válido; se cedieron territorios; la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) dejó a un lado las armas y el terrorismo para ser una organización política; y el Likud cambió en gran medida su ideología y se hizo más moderado", relata.

Este político de 74 años se mostró muy crítico con el actual Gobierno de coalición de Benjamín Netanyahu: "Puede echar a los ministros que se le antoje pero se encuentra atado por sus socios de Gobierno". "Netanyahu ha perdido dos años [los que éste lleva desde que llego al poder en 1996], han sido meses sin ningún resultado favorable para la paz".

En cuanto a la visita de hoy a la zona del emisario estadounidense para Oriente Próximo, Dennis Ross, Peres aseguró que "en este momento ambas partes tienen interés en que las conversaciones sean un éxito". "Puede que haya resultados favorables aunque nunca se puede asegurar nada", concluyó. Con motivo del 5º aniversario del acuerdo para el proceso de paz firmado por palestinos e israelíes el 13 de septiembre de 1993 en Washington, Amnistía Internacional (AI) ha hecho público un informe de 40 páginas en el que se constata que en nombre de la "seguridad" las autoridades israelíes y palestinas sacrifican los derechos humanos y por consiguiente el proceso de paz. Según Amnistía, la situación de los derechos humanos es catastrófica tanto en Israel y en los territorios ocupados como en las regiones autónomas palestinas.

En los últimos cinco años, más de 10.000 palestinos fueron detenidos por las autoridades israelíes. Legitimada por el Tribunal Supremo de Israel, la tortura es rutina en los interrogatorios policiales a los que son sometidos los palestinos. Bajo las autoridades autónomas palestinas han muerto ya 20 presos a causa de las torturas. Particularmente, los presuntos colaboradores de Israel sufren abusos y malos tratos.

AI criticó nuevamente la ejecución de los dos palestinos condenados por un Tribunal Militar extraordinario creado por Yasir Arafat. Sin posibilidad de recurso, ambos fueron ejecutados el día 29 de agosto, tres días después del juicio.