Los partidos democráticos, salvo el PNV, tildan de "electoral" el gesto de HB

Los partidos de ámbito nacional, aunque con matices dentro de IU, y los nacionalistas vascos, excepto el PNV, coincidieron ayer en calificar de "electoralista" el anuncio de concurrir a los comicios vascos bajo la denominación Euskal Herritarrok (Nosotros los ciudadanos vascos). Sólo el PNV, por boca de sus portavoces en el partido y el Congreso, Joseba Egibar e Iñaki Anasagasti, aprecian síntomas de cambio político en la coalición abertzale.

En el ámbito nacionalista vasco las opiniones se dividieron: mientras Eusko Alkartasuna (EA) no dudó en sumarse a las acusaciones de "electoralismo", el PNV aseguró que detecta síntomas de cambio político en HB.El dirigente de EA y consejero de Educación del Gobierno vasco, Inaxio Oliveri, señaló que la decisión de HB de concurrir a los comicios autonómicos bajo el nombre de Euskal Herritarrok responde a un planteamiento "electoralista" y a un "cambio de imagen" que no está acompañado por un cese de las acciones del autodenominado Movimiento Nacional de Liberación Vasco (MLNV) ni al miedo a la ilegalización del partido, que, por otra parte, sólo se le ocurriría, recalcó, a un "demente político".

En opinión de Oliveri, la nueva agrupación electoral responde a un intento de la coalición de ofrecer una imagen "más amable" y menos vinculada a ETA y a un intento de desmarcarse de las acciones del MLNV, aunque advirtió que no se trata de "un cambio de verdad", sino de un "planteamiento electoralista".

"Anormalidades"

De este modo, Oliveri descartó que se haya producido un giro en la izquierda abertzale porque "no solamente vendría con un cambio de actitudes de sus portavoces, sino de quienes se mueven en ese mundo y que por ahora no han cambiado sus formas de actuación". Por este motivo, consideró necesario que acaben las "anormalidades que surgen de ese mundo" y que "las acciones prueben si se da un cambio de verdad o no", ya que por ahora sólo se ha plasmado en "palabras".De modo muy distinto abordó el PNV el cambio de siglas en HB. Joseba Egibar opinó que su anuncio de comparecer a las próximas elecciones vascas con unas siglas nuevas supone que "apuesta decididamente por la vía política", aunque hoy por hoy no tenga vocación de Gobierno. Egibar precisó, en declaraciones a Efe, que la utilización de las nuevas siglas, EH, puede significar también una "apuesta" de HB por desvincularse del "estigma de haber estado durante estos últimos 20 años sometida como formación política a lo que pudiera determinar ETA".

A su vez, el portavoz peneuvista en el Congreso, Iñaki Anasagasti, declaró a Onda Cero: "Ellos quieren hacer política y se presentan con otras siglas y con un aspecto mucho más amplio. Yo creo que es un síntoma. Quien no quiera verlo está en su derecho".

Con mayor cautela, pero en la misma línea, Margarita Uria, portavoz de Justicia del PNV en el Congreso, declaró que los nuevos nombres que se anuncian para las listas de EH "pueden ser una llamada a que haya aires distintos".

Dentro de IU también se oyeron matices diferentes. El coordinador de IU-EB en Guipúzcoa, Antton Karrera, afirmó: "Esto sigue siendo HB. Las gentes que figuran o apoyan las candidaturas son conocidas por moverse en ese mundo y las claves las siguen teniendo los jefes de ETA".

Sin embargo, José Navas, diputado de IU por Vizcaya, piensa que la incorporación de nuevos nombres a las listas electorales de EH "hace pensar que hay un cambio más profundo que el meramente semántico".

Dentro del País Vasco, pero desde el PP, la reacción fue otra. Carlos Iturgaiz, el presidente del partido en Euskadi y candidato a lehendakari, manifestó: "No debemos perdernos en el cambio de siglas o nombres porque son los mismos con distintos collares". Para el dirigente popular, "sólo hay que leer el plantel de nombres, los Idígoras, Otegis, Rafa Díez..., para darse cuanta de que EH es la continuidad de HB". Además, se mostró convencido de que "quien sigue mandando en ese mundo y marcando la línea es ETA". En perfecta sintonía y desde el Gobierno central, José María Michavila, secretario de Estado para las Relaciones con las Cortes, manifestó que "el único cambio importante" que HB podría ofrecer es pedir a ETA que deje de matar. Michavila apostilló: "Lo ideal sería que HB, de verdad, cambiara su mentalidad y pidiera lo que piden los vascos: que ETA deje de matar". También el portavoz de Interior del PP en el Congreso, Ignacio Gil Lázaro, aseguró que la decisión de HB es sólo "un movimiento táctico".

Desde el PSOE las reacciones fueron igualmente duras. El secretario general, Joaquín Almunia, resaltó que sigue apreciando en la coalición independentista "la voluntad de imponer a los ciudadanos su posición" y matizó que eso, en política, es "totalitarismo". "Si además se aplaude, se colabora, se encubre o se explica la violencia", agregó, "estamos ante un problema de fascismo". A propósito de ello, dijo no entender cómo el PNV tiene como obsesión "lavar la cara a esa gente".

Por su parte, el líder de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, reiteró que el análisis que al final hace el PNV es el de cuántos diputados nacionalistas hay en el Parlamento de Vitoria.

El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, abundó en que HB, "más que cambiar de nombre, debe cambiar de munición, dejar las balas Parabellum y dedicarse a hacer una política en la que no entre como ingrediente la pistola".