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La posible ilegalización no ha sido "fundamental" para la creación de EH

HB acordó hace pocos días en una asamblea en Oiartzun (Guipúzcoa), en la que participaron alrededor de 800 militantes, que no concurriría a las elecciones autonómicas con sus siglas. Aunque su posible ilegalización estuvo presente en el "vivo debate" que tuvo lugar entre los militantes, Otegi reconoció ayer que "ese factor está ahí", pero que no ha sido "fundamental" para que HB dé este paso. De hecho, la asamblea ha decidido que esta decisión se circunscribe a los comicios autonómicos y que en cada tipo de elección, HB decidirá si concurre con sus siglas o no. La operación política, sin embargo, tiene un calado mayor, según coinciden los observadores. La necesidad de desgajarse de los rudos y broncos discursos ligados a la anterior Mesa Nacional, ahora encarcelada, junto a la amenaza de un bajón electoral han obligado a sondear la cara más amable del independentismo vasco.Alguno de los representantes de la izquierda extraparlamentaria vasca que participa en la nueva plataforma cree que el movimiento de HB "no es producto del marketing electoral. Ha ilusionado a un montón de gente variada que está dispuesta a tirar de una experiencia necesaria" e inédita en la última década de la historia de HB. Con este movimiento, HB busca recuperar a críticos y a históricos independentistas, así como a muchos de los simpatizantes que se han pasado a la abstención o a otras ofertas electorales.

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