Los afectados por las incineraciones falsas exigen depuraciones

La Plataforma de Afectados por el fraude de las incineraciones falsas de Málaga ha solicitado el apoyo del grupo socialista en el Ayuntamiento para lograr que se refuerce la investigación y que se depuren las posibles responsabilidades políticas del caso. Un grupo de afectados encabezado por el portavoz de la plataforma, Francisco Guzmán, mantuvo ayer una reunión con el portavoz municipal socialista, José Sánchez Bueno. Los 485 miembros de la plataforma temen que la investigación del fraude de las incineraciones falsas, que afectó a 2.800 familias entre 1989 y 1998, pierda fuerza, y están dispuestos a presionar para que el consejo de administración modifique algunas normas de funcionamiento de Parcemasa, la empresa que gestiona el cementerio de Málaga, con el fin de evitar nuevos fraudes. Entre otras cosas, los afectados piden que en adelante se permita a los familiares que lo deseen estar presentes en las incineraciones de sus seres queridos, y también que se aplique una rebaja en los precios de las mismas "para evitar que haya que incinerar a los difuntos fuera de Málaga". Guzmán aseguró que la intención de los afectados "no es en absoluto provocar un proceso paralelo al que está en los juzgados". "En todo caso", puntualizó, "nos negamos a creer que en los ocho años que se realizó esta práctica ilegal ningún trabajador de la empresa se diese cuenta de que se estaban haciendo incineraciones falsas, y queremos que se averigüe si había más gente enterada". En cuanto a los restos de cadáveres hallados en la casa de uno de los implicados, aún están en proceso de identificación. "La policía científica tiene que llamar aún a algunos afectados para la prueba del ADN, pero esperamos que las inhumaciones de los que van siendo identificados comiencen a finales de este mes o en octubre", dijo Guzmán.