La Guardia Civil detiene a 55 inmigrantes de origen africano y confisca 45 pateras antes de ser utilizadas

El combate policial contra la inmigración ilegal se saldó ayer con la detención de 55 inmigrantes provenientes de África, el arresto de un piloto de pateras y la intervención de 45 embarcaciones que presuntamente serían utilizadas para cruzar el Estrecho. Efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil interceptaron en la madrugada de ayer dos expediciones clandestinas, en Ceuta y Algeciras, compuestas por un total de 52 inmigrantes de origen magrebí, cuando cruzaban el Estrecho. Otros tres inmigrantes, también marroquíes, fueron detenidos en Fuerteventura (Canarias) y otro más en Pamplona, después de ser rescatado del remolque de un camión en el que permaneció dos días.La primera operación se inició alrededor de las 2.30 en Ceuta, cuando el radar de una de las patrulleras del Servicio Marítimo detectó el eco sospechoso de una embarcación, que fue localizada 15 minutos después a una milla y media de la costa. El piloto de la patera, un argelino de 20 años, fue arrestado acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores. En esta embarcación viajaban 22 personas de origen magrebí que fueron trasladadas a tierra en el puerto de Algeciras y posteriormente conducidas, esposadas, hasta las dependencias de la comisaría de policía de la ciudad.

El mismo final tuvo la segunda de las expediciones interceptadas. Los agentes localizaron la patera cuando navegaba a unas dos millas de la costa de Punta Carnero, en el término municipal de Tarifa (Cádiz), con un total de 29 personas a bordo, entre las que se encontraba una mujer. Cinco de los detenidos en estas acciones figuran en los archivos policiales como reincidentes. Otros catorce marroquíes lograron llegar a las costas de Puerto Rosario, en Fuerteventura, a bordo de una patera. Los vecinos avisaron a la Guardia Civil sobre la llegada de la embarcación, pero los agentes sólo pudieron detener a tres ocupantes.

Otras pateras fueron intervenidas ayer en Ceuta antes de ser utilizadas. La Guardia Civil requisó 45 embarcaciones que carecían de matriculación legal o que estaban varadas en zonas no habilitadas del litoral. Las pateras fueron trasladadas a un emplazamiento de la Administración de Aduanas, en donde se espera que sean destruidas como las 116 que incendió la delegación del Gobierno el 18 de agosto.

En Pamplona, un magrebí de 30 años fue rescatado del remolque de un camión situado en una gasolinera. Según la Guardia Civil de Tráfico, el inmigrante permaneció encerrado durante dos días dentro del remolque, por lo que fue trasladado a un hospital, con síntomas de asfixia. Una vez "repuesto", fue conducido a la Brigada de Documentación para tramitar su expulsión.

El director de la Guardia Civil, Santiago López Valdivielso, ha insistido durante este verano, ante la masiva afluencia de inmigrantes ilegales a España, que los inmigrantes no deben ser considerados como delincuentes y que las acciones de Interior se dirigen contra los responsables de las redes de inmigración. Entre las 56 detenciones realizadas ayer sólo se contabilizó la de un piloto de pateras.

En Marruecos, una patera con 31 personas a bordo fue interceptada el sábado cuando iniciaba el viaje a costas españolas.