El Ayuntamiento de Sevilla quiere mejorar la imagen de su policía local
El Ayuntamiento de Sevilla está dispuesto a mejorar la imagen de la policía local ante la ciudadanía. La primera medida fue la creación de una oficina de contacto ciudadano. La segunda se agilizará en septiembre con la puesta en marcha con carácter experimental en la barriada Murillo (vulgo Tres Mil Viviendas) de la figura del policía de barrio. "Es un tema difícil, pero no hay marcha atrás", dijo ayer Luis Miguel Martín Rubio, delegado de Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento sevillano. En otoño será historia el pabellón de Brasil, edificio de la Exposición del 29 que han ido abandonando progresivamente los servicios policiales para trasladarse a la nueva jefatura de la Cartuja, en los terrenos de la Exposición del 92. En el otro edificio sólo quuedan la Brigada Móvil, el centro de Control y los servicios de actuación inmediata. Martín Rubio hizo balance de su departamento, deteniéndose en los tres contingentes que gobierna: policía local, bomberos -cuerpo que ampliará su plantilla con la convocatoria de 90 nuevas plazas- y Protección Civil. La policía local estrenará nuevas motocicletas y según el delegado está recogiendo los frutos de la mejora de las herramientas legales, concretamente las relativas a las nuevas ordenanzas sobre venta ambulante y ciclomotores. "Había que poner orden en ese caos de conductores sin matrícula, sin casco, con escape libre". María Rodríguez, portavoz adjunta del grupo socialista en el Ayuntamiento, interpretó las acusaciones de deslealtad que Soledad Becerril ha hecho a Alejandro Rojas-Marcos. "Es un sainete ensayado desde hace siete años con los mismos personajes y los mismos argumentos".
