Sierra Nevada consolida una alternativa turística de verano

Sierra Nevada ya no es sólo una estación invernal preparada exclusivamente para la práctica del esquí, pues en los dos últimos años se está haciendo un esfuerzo para convertirla en una estación de montaña que atraiga visitantes y sea una alternativa de ocio en el periodo estival. En verano la oferta hotelera se reduce a la mitad respecto al invierno, pero las previsiones para los meses de julio y agosto de este año están al 60% de ocupación hotelera, algo que "demuestra el éxito de dos años de trabajo con el objetivo de potenciar la oferta turística en verano", explicó ayer el director general de Cetursa, José Francisco López Luz. López Luz dijo que Sierra Nevada no pretende obtener una rentabilidad económica, sino de valor añadido, es decir, de mantenimiento de las instalaciones y de la actividad económica de la zona, con los puestos de trabajo que eso conlleva. Sierra Nevada cuenta con la desventaja de que históricamente ha tenido una situación de actividad veraniega muy baja, aunque "no hay que ser muy ambiciosos a corto plazo porque el turismo potencial de la zona prácticamente no existe en este país y hay que crearlo poco a poco mediante una buena calidad de servicios", indicó el director de Cetursa. Sin embargo, Sierra Nevada tiene una ventaja importante "que hay que saber aprovechar" y es que se encuentra a pocos kilómetros de la costa y de una ciudad turística como Granada, por lo que "puede constituir una oferta complementaria, tanto para aprovechar la afluencia turística a estas zonas, como para ofrecer a sus propios visitantes otras posibilidades", explicó López Luz. Este año se ha hecho un programa veraniego que incluye gran cantidad de actividades, sobre todo durante los fines de semana cuando se está produciendo la mayor afluencia de turistas y deportistas atraídos por las competiciones de parapente o bicicleta de montaña que se celebran este verano en Sierra Nevada.