El Tossal de Manises de Alicante reabre hoy sus puertas tras su conversión en museo

Con los importantes yacimientos de Empúries (Girona) y Baelo Claudia (Bolonia, Cádiz), se ha comparado la puesta a punto del Tossal de Manises, en L"Albufereta de Alicante, a poco menos de tres kilómetros de la ciudad. Por su situación, por los esfuerzos inversores de las instituciones pertinentes, que una vez convencidas de la espectacularidad y la viabilidad del proyecto no han regateado medios para llevarlo a cabo; y sobre todo por el resultado obtenido tras los trabajos, que en el caso de la antigua Lucentum han convertido el espacio donde se ubica en el mayor parque arqueológico de la provincia.

Pese a la trascendencia científica de este yacimiento, cuyas investigaciones se remontan al siglo XVIII, no había cuajado en un proyecto serio de recuperación de las ruinas que posibilitara su apertura al público. A pesar de que el Tossal se había excavado en el pasado reciente por eminentes arqueólogos, el estado de abandono en que se encontraba y el abusivo expolio al que ha estado sometido hasta fechas muy cercanas han hecho que las tareas previas de limpieza y consolidación de las estructuras conservadas retrasaran la conversión en museo de las ruinas, hoy finalizada. El trabajo ha sido coordinado por el arquitecto Rafael Pérez y por el arqueólogo Manuel Olcina, ambos empleados de la Diputación de Alicante, la institución que ha llevado el peso de las inversiones en el yacimiento, cifradas en cerca de 300 millones de pesetas en las últimas tres campañas. Los trabajos comenzaron en 1994, y han supuesto la mayor intervención de estas características en un yacimiento del País Valenciano, tanto por la extensión de lo intervenido como por la complejidad de las estructuras tratadas. Desde entonces se han definido y consolidado los restos arquitectónicos exhumados hasta el momento en aproximadamente un tercio de la superficie del yacimiento, de tres hectáreas de extensión, se ha localizado el foro de la ciudad, se han reconstruido parcialmente algunas edificaciones para facilitar la comprensión del conjunto, y se han habilitado sendas y pasarelas que permiten observar muy de cerca las ruinas sin miedo a que éstas sufran el más mínimo deterioro. Hay una serie de rasgos sobresalientes que hacen de la ciudad romana de Lucentum, edificada sobre un poblado ibérico de principios del siglo IV antes de Cristo, un yacimiento único. En primer lugar, se trata de un municipio que conserva íntegra toda su extensión, sin afectarle construcciones modernas, y que además goza del rango jurídico de Monumento Histórico-Artístico desde 1961, una catalogación que ha logrado salvaguardarlo de la presión inmobiliaria que cambió el paisaje de L"Albufereta a lo largo de la década de los setenta y que lo llenó de grandes torres de apartamentos. En la Comunidad Valenciana sólo la vecina Ilici (Elche) y Lessera (El Forcall, en Castellón, de mucha menor importancia) son ciudades antiguas sin intervenciones posteriores, pero el Tossal de Manises conserva la mayor superficie de restos excavados. Por otra parte, Lucentum presenta el circuito amurallado antiguo más extenso y complejo de todo el territorio valenciano, además de la mayor red de calles romanas excavadas. Sus edificios comerciales y sus importantes termas hacen del yacimiento alicantino un ámbito privilegiado para el estudio de la historia antigua. Una característica destacable del Tossal de Manises es que en pocos años su entorno estará urbanizado totalmente, de tal manera que una ciudad romana completa quedará rodeada por una moderna, un hecho extraordinariamente importante ya que se constituiría en un yacimiento arqueológico único en nuestro país. La antigua Lucentum quedará inaugurada esta noche por todo lo alto, con la actuación del tenor Sempere y un ballet que evocará en su coreografía la época romana. Las actuaciones tendrán lugar en una gran explanada frente a la muralla, un espacio que la Diputación de Alicante pretende reservar para conciertos futuros. Los fuegos artificiales precederán al vino de honor compartido por 600 invitados, entre los que se encuentran la ministra de Cultura, Esperanza Aguirre, el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, el consejero Francisco Camps y destacadas personalidades del mundo cultural valenciano. El público podrá conocer el yacimiento a partir del próximo sábado.