El "Petrolio" estalla de nuevo
Los pegadizos sones del himno de la Internacional Obrera y miles de octavillas convocaron anoche en Alcoy a la insurrección del proletariado. "La triste y miserable situación que atraviesan los trabajadores alcoyanos y el justo deseo de mejorar sus condiciones sociales, les ha obligado a declararse en huelga general"; así tomaba cuerpo el llamamiento, frente al Ayuntamiento de Alcoy, por la emancipación de los obreros que ayer exhumó la histórica ciudad industrial. Jóvenes que gritaban las consignas lanzadas por los trabajadores en 1873 invitaron a revivir la Revolució del Petrolio, que cobró fuerza tal noche como la de ayer hace 125 años. Los incendios que sufrieron las casas próximas al Ayuntamiento durante la revuelta también se escenificó. Un efecto visual puso en llamas la fachada del Ayuntamiento. La misma fachada desde la que el entonces alcalde, Agustín Albors, con disparos al aire, trató de parar las protestas de los obreros. No se repitió el trágico final que tuvo aquel primer edil, que tuvo una muerte violenta y fue arrastrado por las calles de la ciudad. Fue la última de las 16 muertes que causó la insurrección, que originó debates en las Cortes nacionales. Alcoy evocó el año que ahora recuerda como el del Petrolio: el petróleo fue el combustible que incendió la revuelta y es un símbolo del desarrollo industrial que se vivía en 1873. Ese año comenzó con la reunión del Consejo Federal Regional de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) que tomó como sede Alcoy. Fueron meses de asambleas que pretendían acabar con las miserias del proletariado: infrahumanas condiciones laborales, la insalubridad en las viviendas... Esas reuniones se recordarán con el programa de actos preparado por el Club d"Amics de la Unesco.
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