El Ayuntamiento reduce el impacto ambiental de la reforma del frente marítimo del Besòs

Primero fue la apertura de la ciudad al mar con la Villa Olímpica. Ahora la reforma del frente marítimo va más allá y llegará hasta la desembocadura del río Besòs. El proyecto supone una modificación de la propuesta inicial de la reforma del frente marítimo y reduce el terreno que se ganará al mar. El plan fue presentado ayer por el alcalde, Joan Clos, que subrayó su importancia porque posibilitará la ampliación de la depuradora del Besòs, la ubicación del nuevo zoo, una nueva playa y zona de baños, y el puerto deportivo de Sant Adrià de Besòs.

El proyecto aprobado modifica el inicialmente diseñado y supone ganar menos terreno al mar con la finalidad de mantener la línea marítima natural y reducir el impacto medioambiental. El Ayuntamiento de Barcelona anunció ayer que remitirá al Ministerio de Medio Ambiente la propuesta de ordenación del frente marítimo en la desembocadura del Besòs. El proyecto inicial suponía ganar al mar 75 hectáreas, superficie que finalmente quedará reducida a una plataforma de 55 hectáreas. Clos precisó ayer que aunque la reducción supone un ahorro en los costes, éste no ha sido el factor clave para la modificación. Así, el alcalde destacó que la modificación obedece al interés de dar con una solución "más ecológica y que no violentara la línea de la costa". Según explicó Clos, el coste de la primera fase de la reforma del frente marítimo -la construcción de diques y rellenado de tierras- costará 6.500 millones de pesetas. Apuntó que no se prevén dificultades para la financiación del proyecto porque confían en encontrar operadores. No obstante, también indicó que si no los hubiera, el Ayuntamiento asumiría el coste de esa fase de la reforma. El proyecto, que también debe elevarse al Consorcio del Besòs, establece la reducción del puerto deportivo que se pretende construir en Sant Adrià de Besòs, que se limitará a 1.000 amarres. Según el proyecto de reforma del frente marítimo, se formarán tres subplataformas. La primera, de unas veinte hectáreas, dedicada al parque zoológico y a la zona de "marismas artificiales", aprovechando la Riera de Horta. En la segunda, se ampliará la actual depuradora del Besòs para que pueda realizar el tercer ciclo de depuración de aguas (biológico). A continuación se situará el nuevo puerto deportivo de Sant Adrià, en el que "desembocará" la prolongación hasta el mar de la avenida Diagonal. Finalmente, en la tercera subplataforma estará el parque del Mar y una nueva playa antes de llegar a la desembocadura del Besòs. Un paseo recorrerá el nuevo frente marítimo. La fachada litoral del parque zoológico y de la depuradora del Besòs se aprovechará para crear una zona de baños públicos de 900 metros. En esta zona, el proyecto municipal prevé la construcción de un muro submarino, a modo de arrecife artificial, que permitirá suavizar el impacto de las corrientes marinas y recuperar la flora y fauna del litoral, así como la práctica de actividades subacuáticas y marinas, al estar el agua más remansada, según explicó ayer Juan Antoni Acebillo, de Barcelona Regional. En esta zona está previsto también organizar actividades náuticas para niños. El alcalde insistió en que la ampliación de la depuradora del Besòs y la construcción de la del Llobregat harán que "las aguas de Barcelona estén en condiciones óptimas y en una situación que hace decenas de años que no se da".