Los 'okupas' del centro 'Tierra Libre' toman otro edificio en Tetuán
Casi treinta okupas tomaron, durante la madrugada del lunes al martes, un edificio abandonado en el número 63 de la calle de Lérida (Tetuán). Plantearon esta okupación como acto reivindicativo ante el desalojo, el pasado lunes, del centro social Tierra Libre, que habían constituido en un piso sin habitar de la calle de Olite.Una portavoz de este colectivo indicó: "Nuestra okupación es una respuesta directa, sin que tenga que ser un sabotaje ni una manifestación, sino realmente lo que queremos hacer. Además, ha habido un cambio de dinámica en el sentido de no seguir con casas antiguas y centrarnos un poco más en el terreno especulativo de esta zona".
La misma fuente señaló que, en la mañana de ayer, "se acercaron dos policías nacionales que trataron de entrar en el edificio por la fuerza, mientras que los okupas sujetaban la puerta y la reforzaban con varios objetos pesados".
El edificio okupado, que tiene cuatro plantas y un sótano, fue construido hace cuatro años y nunca ha estado en uso, además de que pertenece "a un particular que posee 10 naves más, según consta en el Registro", aseguró. "Todo lo que están construyendo en Tetuán son locales, o sea que, excepto lo que es Patrimonio Artístico, hay ciertas casas que se irán demoliendo y se irán construyendo oficinas, al igual que la tendencia que viene de Europa, en que el centro son zonas en las que el nivel de vida es muy alto, pero no hay nadie viviendo allí".
Añadió que en el desalojo "cautelar" de Tierra Libre, "en el que no se avisó a la gente que estaba dentro y nos enteramos porque nos cortaron el agua y la luz y pusieron dos señales de tráfico de prohibido aparcar, la policía no encontró a nadie en el interior del edificio porque nos habíamos ido".
Los okupas estuvieron en este edificio de la calle de Olite tres meses, y llevaron a cabo en él actividades de todo tipo, como talleres -inglés, malabares, matemáticas y teatro- o pases de vídeo, disponían de una biblioteca, además de que organizaban fiestas para recaudar dinero para otros colectivos.
