Holanda comienza esta semana a distribuir heroína gratuitamente de forma experimental

Tras varios meses de discusión y con algunos de retraso sobre el calendario previsto, casi medio centenar de toxicómanos holandeses comenzarán esta semana a recibir bajo prescripción médica la heroína que necesitan. Es la primera fase de una amplia investigación que trata de evaluar si la distribución gratuita controlada mejora la salud física y psíquica de los adictos y consigue disminuir los problemas que causan al resto de la sociedad.

La experiencia holandesa se basa en la que ya se realiza en Suiza desde 1994 y que actualmente está valorando una comisión de la Organización Mundial de la Salud.

Tal y como estipulan los tratados internacionales, las autoridades holandesas tuvieron que solicitar a la ONU permiso para comprar e importar la droga del experimento. El Gobierno no ha revelado la cantidad necesaria ni el país del que proviene, aunque ha confirmado que no es resultado de confiscaciones, sino que ha sido fabricada en laboratorio.

En esta primera fase, de tres meses, participarán casi 100 adictos de Rotterdam y Amsterdam. La investigación comparará dos tipos de tratamientos: el habitual con metadona, reforzado con ayuda psicológica, y el mismo tratamiento combinado con tomas regulares de heroína. La mitad de los toxicómanos, 25 en cada ciudad, recibirán la droga siete días a la semana tres veces por día, y el resto recibirá sólo el sustituto de la droga.

Los participantes han sido reclutados entre los considerados casos sin solución, heroinómanos que llevan más de un lustro consumiendo drogas duras y que han pasado sin éxito por varios programas de desintoxicación. Son mayores de 25 años y participan actualmente en programas de metadona. La mitad de los escogidos se inyecta la droga y el resto, la inhala.

Calidad de vida

Para ninguno de ellos hay esperanza de recuperación. "Se trata sólo de mejorar su calidad de vida. El adicto es para nosotros un paciente y la heroína, una medicina", dice J. van Ree, presidente de la comisión investigadora.Aunque Holanda es uno de los países europeos con menor cantidad de toxicómanos de Europa, se calcula que hay unos 25.000 heroinómanos. Un 40% consigue limpiarse y el 15% muere en un plazo de 10 años, en muchos casos por suicidio. Del resto, poco más de la mitad consume la droga con control y los otros sufren graves problemas físicos o psíquicos.

El proyecto se encontró con algunas dificultades en el Parlamento, que finalmente lo aprobó en septiembre. Comenzar a pequeña escala y dividir el experimento en fases que permitan resultados rápidos fue la solución de compromiso acordada entre las fuerzas políticas. Dentro de tres meses se realizará una valoración para analizar "si no se derivan efectos secundarios perjudiciales". Entonces, podrá seguir en varias ciudades como Utretch, Groninga y Maastricht.