El PP reprocha a Arzalluz su victimismo: "Los linchados somos nosotros"

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, se lo puso fácil al PP al denunciar un supuesto "linchamiento del nacionalismo" por los contactos que mantiene con HB. Con seis concejales asesinados desde que en julio de 1997 ETA secuestrara y diera un tiro en la nuca a Miguel Ángel Blanco, "todo el mundo sabe quienes estamos siendo linchados físicamente", le recordó ayer el secretario general del PP vasco. Carmelo Barrio exigió a Arzalluz que "abandone el victimismo" y le recordó su ausencia en los actos de solidaridad con la familia del concejal Manuel Zamarreño. Mientras, el presidente del Gobierno, José María Aznar, resaltaba en Egipto que "todo el terrorismo es detestable, se produzca donde se produzca".

Las declaraciones de Arzalluz, reiterando que no truncará, pese a los atentados de ETA, el acercamiento del PNV con los componentes de la Mesa Nacional de HB, provocaron ayer todo tipo de reacciones. A la respuesta crítica del PP se unieron la postura escéptica del coordinador general de IU, Julio Anguita, y las palabras de apoyo del presidente de EA, Carlos Garaikoetxea.El coro de voces en favor de las tesis nacionalistas fue reforzado por el portavoz parlamentario del PNV, Iñaki Anasagasti, para anunciar que su partido responderá políticamente a las invectivas de los populares, pero sin quemar las naves. "Aunque no signifique romper con el PP en Madrid, estamos estudiando cómo responder a todo ello", dijo.

El secretario general del PP, Carmelo Barrio, acusó a Arzalluz de hacer un "victimismo de fábula" y lamentó que su pronunciamiento público fuera para "infamar al PP". En un comunicado de prensa, el responsable de los populares vascos expresó su malestar por las declaraciones del líder de los peneuvistas, en las que Arzalluz situaba al PNV como víctima de un "masivo linchamiento tanto político como mediático". Barrio le respondió: "Los miembros del PP sabemos que no contamos con la solidaridad y el apoyo de Arzalluz ante el acoso al que estamos siendo sometidos, por eso no le pedimos su afecto en estos momentos difíciles, pero sí le pedimos que no sea cruel".

En relación con el anuncio del presidente del Euskadi Buru Batzar de que va a "tomar nota" de los que quieren linchar al PNV, Barrio indicó: "Arzalluz añade, con esta confusa advertencia, una nueva duda a la política vasca, que está necesitada de claridad y franqueza, no de confusión y, mucho menos de amenazas de este tipo, de las que estamos sobrados y, particularmente, en el PP".

El secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, comentó que la actitud de su partido hacia el PNV "no es un linchamiento, sino un juicio político duro". Y matizó: "Tan duro como escuchar las palabras del PNV" sobre sus relaciones con HB.

El líder de IU, Julio Anguita, llegó a Vitoria para participar en una fiesta del Partido Comunista en las campas de Olarizu. Allí aseguró que no ve que los contactos entre el PNV y HB que propugna el partido de Arzalluz con el entorno de HB "puedan conducir a nada, pero no maldigo al PNV. No le puedo poner por ello la lacra de traidor a la causa".

IU tampoco renuncia a mantener contactos con HB, aunque ayer el coordinador de la coalición en el País Vasco, Javier Madrazo, explicó que "todavía no se dan las condiciones". Y aclaró: "Hoy no hay voluntad en HB para pedir a ETA que abandone las armas. No nos vamos a embarcar en un proceso de ese tipo, pero tampoco en un proceso de confrontación".

Por su parte, Carlos Garaikoetxea, responsable de Eusko Alkartasuna, manifestó en San Sebastián que ni las campañas manipuladoras con las que el PP trata de confundir y culpabilizar globalmente de los actos de violencia a todo el nacionalismo vasco, ni el "órdago intempestivo" con el que Nicolás Redondo ha amenazado sobre una posible inestabilidad institucional, van a hacer "cambiar un ápice" las posturas que hasta ahora EA ha mantenido en el Parlamento vasco, informa Genoveva Gastaminza. El presidente de EA anunció que el hecho de que esta formación no vaya a apoyar mañana lunes el acatamiento a la Constitución Española en la prevista votación del Reglamento de la Cámara vasca tan sólo muestra "una postura sobradamente conocida", no sólo de su partido "sino del nacionalismo en su conjunto", por tratarse de una discrepancia de orden doctrinal.

Aznar en el Cairo

El presidente del Gobierno, José María Aznar, rompió ayer con una costumbre habitual en sus conferencias de prensa en el extranjero: pronunciarse sobre temas de política interior. En El Cairo, menos de 48 horas después del asesinato del concejal del PP de Rentería Manuel Zamarreño, evitó cualquier comentario sobre la situación en el País Vasco. Aznar había sido preguntado sobre si consideraba que existen condiciones democráticas suficientes para celebrar unas elecciones libres en el País Vasco y si su partido sería capaz de presentar listas en todos los municipios de Euskadi. El presidente del Gobierno no quiso entrar en un tema tan espinoso como delicado para su propio partido y se limitó a hacer una condena rotunda y global del terrorismo. "El terrorismo es detestable y miserable se produzca donde se produzca", señaló en la rueda de prensa conjunta que ofreció junto al presidente de la República, Hosni Mubarak, en El Cairo.Poco después, en un almuerzo con empresarios españoles en la capital egipcia, Aznar dijo que había decidido mantener su visita a la ciudad monumental de Luxor en solidaridad con el Gobierno egipcio por el grave atentado terrorista que se registró en esa ciudad monumental del valle del Nilo que originó una fuerte caída en su industria turística.

El terrorismo también estuvo presente de alguna forma en la visita que el presidente hizo al Premio Nobel de Literatura Naguib Mahfuz. El anciano escritor, cuyo estado de salud es muy delicado, fue víctima de un atentado hace años a manos de un fundamentalista islámico. Tanto Mubarak, como Mahfuz y el propio Aznar han conseguido sobrevivir al terrorismo.

El presidente, que mañana viajará a Israel, ofreció a los lectores egipcios un comentario irónico sobre la profesión de los periodistas. "Mi abuelo, mi padre y mi tío fueron y han sido periodistas. Yo he decidido ser el hombre razonable de la familia", dijo, según publica el diario Al Ahram que le entrevistó en Madrid.