Escolar defiende que Banesto pagase 300.000 pesetas por acciones compradas a 10.000 un mes antes

"La Corporación Industrial entró en Oil Dor al precio convenido. ¿Por qué iba a ser más barato?¿Por qué hacer un regalo a la Corporación?", declaró ayer el ex consejero de Banesto Rafael Pérez Escolar, al preguntarle el fiscal una y otra vez por qué razón, qué fue lo que ocurrió, ya que mientras en mayo de 1992 las sociedades familiares de Pérez Escolar pagaron 10.000 pesetas por cada acción de Oil Dor, un proyecto de red de estaciones de servicio, un mes y medio después, en julio de 1992, la Corporación Industrial pagó un precio 30 veces superior, es decir, 300.000 pesetas por título.

El rictus de Rafael Pérez Escolar volvió a endurecerse al llegar ayer el turno del abogado Luis Muñiz, de AGF-Unión y el Fénix. La aseguradora es presunta responsable civil subsidiaria en el caso Banesto al estar en disputa una póliza por valor de 10.000 millones de pesetas firmada con el equipo de Mario Conde para cubrir posibles responsabilidades de los administradores.El letrado preguntó al acusado si conocía que estaban fuera de las reclamaciones aquellas causadas por el hecho de que el asegurado, directa o indirectamente, haya obtenido un beneficio o remuneración, al cual no tenía derecho, aprovechándose de su cargo, aún en caso de no haber incurrido en un delito.

Pérez Escolar se cubrió:

-Yo no he tenido ningún beneficio de este tipo ni me he aprovechado de mi cargo.

"Solo quería saber si lo conocía", dijo el letrado.

El fiscal Javier Sánchez Junco empezó ayer a preguntar por la operación Oil Dor, presunta estafa en la que sociedades familiares de Pérez Escolar obtuvieron de una venta a Corporación Banesto beneficios de 638 millones.

Las sociedades familiares de Pérez Escolar invirtieron 22 millones de pesetas en el proyecto de red de gasolineras Oil Dor, en octubre de 1991 y mayo de 1992. Un mes y medio después de la última fecha, esto es en julio de 1992, la Corporación adquirió un 50% de Oil Dor, cuyo capital era de 400 millones, por 6.000 millones de pesetas. Pérez Escolar, que era consejero de Oil Dor (vendedores), y miembro de la comisión ejecutiva de la Corporación (compradores), no vendió sus 2.200 acciones, pero cinco sociedades de su familia vendieron sus 2.200 títulos a la Corporación, con un beneficio de 638 millones.

El fiscal preguntó qué había ocurrido "en medio" para que una acción suscrita a 10.000 pesetas por Pérez Escolar y sus familiares fuera pagada por la Corporación a 300.000 pesetas. Porque sólo un mes y medio antes de entrar la Corporación Banesto, las citadas sociedades habían vuelto a suscribir acciones a 10.000 pesetas cada una.

Pérez Escolar dio una larga explicación. Dijo varias veces que el proyecto había sido elaborado por Francisco González, actual presidente de Argentaria. Insistió sobre el método de flujos de caja para calcular la proyección de Oil Dor y explicó que no había por qué hacer un regalo a la Corporación. Subrayó que su familia había ganado en la venta pero que luego aportó más dinero a Oil Dor y que, finalmente, perdió 153 millones.

El presidente, Siro García, pidió al acusado que no se repitiera. Y más tarde autorizó al fiscal a repreguntar. "Estoy a punto de rendirme Señoría. Tengo que tomar la respuesta como una negativa a contestar". Pérez Escolar protestó. "Yo contesto de acuerdo con mi leal saber y entender. Me lo tiene que respetar", dijo.

El fiscal preguntó varias cosas más. Hasta que decidió cerrar el interrogatorio.

-¿No es más cierto que al entrar en el negocio, ya sabía usted que la Corporación Banesto pagaría la acción de Oil Dor 30 veces más que el precio pagado?

Pérez Escolar replicó:

-Tengo que hacer un esfuerzo para cumplir la ecuanimidad en esta sala. Tengo que contener la indignación ante lo que acaba de preguntar...