Multas

En EL PAÍS del pasado día 10 de junio leía con admiración una opinión acerca de las multas en Madrid. Estoy de acuerdo en que hay en determinadas calles en las que por un restaurante o un bingo hay doble fila, e incluso triple fila (como es el caso del bingo de la calle de Bravo Murillo, 95), que utilizan, de los cuatro carriles que hay, dos para ellos, teniendo 50 plazas en un aparcamiento cercano. Paso casi todos los días paso por allí y nunca he visto a la grúa, ni a la policía diciéndoles que los quiten.Pero no estoy de acuerdo en que si un coche está mal estacionado, y aunque no estorbe a nadie, no se lo pueda llevar la grúa, porque si no todos dejaríamos el coche encima de la acera, porque ¡como no estorba a nadie!

Comenta el caso de cuando aparcó en la calle de Pío Baroja, o, mejor dicho, dejó el coche en la firma formada en el centro de la calle. Es muy cómodo llegar y aparcar, incluso si es en mitad de la calle, pero hay personas (entre las que me incluyo) que para ir al Retiro o a cualquier otro sitio, o voy en metro o me paso una hora o más buscando aparcamiento, con lo cual no tengo el problema de que se lo lleve la grúa. Con lo cual, si lo deja mal aparcado, tiene que tener en cuenta las posibles consecuencias, aunque estoy de acuerdo en que hay muchos más coches que molestan mucho más y que la policía no los tiene en cuenta. Pero si usted cree que no tenían derecho a ponerle una multa, imagínese si deja bien aparcado el coche, con su tarjeta de estacionamiento y le multan, como a mí, porque una rueda está "rozando" el bordillo de la acera. Entonces, ¿qué pensaría?- .