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Una nueva compañía de Sevilla gana el Premio de Teatro Breve de Barcelona

Margot Molina

,Dos actores sevillanos recién salidos del Instituto del Teatro y con la primera obra de su propia compañía formada hace un año han conseguido, el pasado lunes, el Premio Especial del Jurado al Mejor Espectáculo en el III Certamen de Teatro Breve de Barcelona. José Luis García-Pérez y José María Peña han sido los únicos andaluces que han llegado a la fase final del certamen y también el único grupo que ha presentado una obra en castellano, el resto lo hizo en catalán.

Cuatro y una silla... que son cinco es la obra con la que dIGO dIGO tEATRO ha conseguido el premio que otorgan la Sociedad de Gestión de Actores e Intérpretes de España (AISGE), la Asociación de Actores de Barcelona y Barcelona Televisión. La obra, una "comedia patética" como ellos la definen, pasó una primera selección a la que concurrieron 40 compañías y la final que se ha realizado durante 14 lunes consecutivos, un día por cada grupo seleccionado, en la sala barcelonesa Artenbrut. La convocatoria ha sido para producciones de menos de 75 minutos de duración. "El merito de José María y José Luis es que ellos son también autores del texto. Han creado personajes de diario. Hacen unos tipos derivados de la máscara contemporánea y que equivalen a una pareja de clown", comenta Juan Carlos Sánchez, director del montaje. Ésta es la segunda compañía de actores noveles que salta a la fama de la mano de Juan Carlos Sánchez. Primero lo hicieron las cuatro actrices de Valienta Plan. Precisamente el taller de Máscara Contemporánea que dirige Juan Carlos Sánchez fue el germen del grupo. "El espectáculo nació en el taller en diciembre de 1996. Le propusimos a Juan Carlos algunas ideas sobre la vida del actor, lo que le pasa en el camerino y le gustaron", explica José Luis García-Pérez, de 26 años. El dúo, que estrenó la obra en octubre de 1997, según el director, "conecta muy fácilmente con la gente de la calle". "Somos como una pareja de clown, con el payaso blanco y el payaso tonto, pero en lugar de payasos representamos a actores", dice García-Pérez. "Lo que pretendemos es que el público se ría pero que, cuando llegue a su casa, se pregunte de que leche se ha estado riendo durante una hora", añade el actor para que quien no ha visto el espectáculo se haga una idea de su comedia patética. "El montaje tiene un final feliz porque lo que queda de todas esas tensiones es el teatro que, como siempre, sigue hacia delante", asegura.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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