Las obras en Antonio López y en O"Donnell obligan a arrancar 160 árboles de las aceras

Dos obras municipales amenazan a 160 árboles. Al menos 30 de los plantados en la calle de O"Donnell sufrirán las consecuencias de la construcción del túnel que ha empezado en esa calle el Ayuntamiento. Las obras contemplan un ensanchamiento de la calzada y reducen, por tanto, la acera de los números pares. Los árboles que se asientan en ella "serán trasladados", según el Ayuntamiento. La misma suerte correrán 129 plátanos que crecen desde hace más de veinte años en la calle de Antonio López. El PSOE no se fía y cree que todos los ejemplares morirán.

Las obras municipales en la calle de O"Donnell suponen un estrechamiento de la acera. En Antonio López, el objetivo de los trabajos previstos es el contrario: ensancharlas, pero en ambos casos el gobierno municipal tiene previsto arrancar los arboles. El diseño final del túnel de O"Donnell (que salvará bajo tierra la calle del Doctor Esquerdo debajo de otro paso inferior ya existente) provocará que la calzada gane un carril más para los coches. Resultado: los árboles que actualmente están plantados en la acera de los pares, desde la calle del Doctor Esquerdo a la de Máiquez, tendrán que cambiar su acomodo.Un portavoz de la Concejalía de Obras, responsable de los trabajos del túnel, aseguró ayer que todos los ejemplares "se trasladarán a Aravaca". El concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, así lo ha exigido. Las obras complementarias de este paso inferior, que incluyen un nuevo ramal que unirá la M-30 con O"Donnell, afectan a otros 100 árboles de la zona. "Pero no se sabe todavía cuántos serán trasladados", añade el portavoz de la Concejalía de Obras.

En la calle de Antonio López, una de las principales vías comerciales de la ciudad, las obras de rehabilitación acabarán con los 129 árboles situados entre la glorieta del Marqués de Vadillo y el Puente de Praga. Los vecinos han recogido 1.500 firmas para que se respeten los arboles y han convocado una manifestación el sábado, pero el concejal del distrito, Alberto López Viejo, mantiene que es necesario arrancar los plátanos.

"Unos están dañados y otros han adquirido un porte excesivo para el ancho de las aceras", señala. Las obras ampliarán las aceras hasta más de cuatro metros. Según el concejal, los árboles sanos se llevarán a parques de la zona. La edil socialista Ruth Porta no se cree lo del traslado incruento. "Yo he pasado por O"Donnell y he visto árboles talados. Además, hablan de que se trasladan ejemplares muy viejos, que ya no pueden ser movidos de donde están. Sus mismos informes aseguran que, cuando se traslada un árbol viejo, éste se muere", denuncia Porta. Un vecino de la zona aseguró ayer que los árboles talados en O"Donnell son más de sesenta. La Concejalía de Obras adelantó que, cuando terminen los trabajos, la calle "tendrá más árboles incluso que ahora, ya que se plantarán ejemplares nuevos".

En 1997, los árboles trasplantados por obras han sido más de ochocientos. El PSOE asegura que de todos éstos "no se ha salvado ni uno".