El PSOE federal pide a sus direcciones que "alienten" la participación de candidatos valiosos

La ejecutiva federal del PSOE, por boca del secretario de Política Municipal, Alfonso Perales, recordó ayer en Sevilla a sus direcciones territoriales que no pueden mantenerse al margen del proceso de primarias, practicar el tancredismo y propiciar que candidatos valiosos renuncien a presentarse a la carrera electoral. Perales citó exclusivamente a la ex ministra de Cultura Carmen Alborch, quien ha desistido de competir para la alcaldía de Valencia, por falta de apoyos internos de su federación, y aclaró que no se refería a ningún caso en Andalucía. "No es aceptable que las direcciones pasen de tener un poder absoluto a ser direcciones administrativas", aseguró.

Algunas afirmaciones del responsable federal de Política Municipal sonaron a reproches. El sistema de primarias ha provocado un cambio en el modelo de organización del partido socialista y si antes todos los candidatos lo eran por decisión de las ejecutivas, ahora los aspirantes evitan aparecer con los integrantes del aparato. Las ejecutivas, por su parte, también eluden proponer abiertamente a un candidato en concreto temerosas de que si no sale, el voto de rechazo se interprete como un desautorización a su gestión. Para Alfonso Perales, las direcciones del PSOE "tienen que ser neutrales y equidistantes" con los candidatos, "pero tienen la obligación de alentar a que los mejores se presenten. No pueden adoptar una posición administrativa de anotar quién se va a presentar y limitarse a suministrar las papeletas. Sería inadmisible que adoptaran el papel de don Tancredo". El secretario de Política Municipal se refirió al caso de Valencia: "El papel de la dirección es evitar que Carmen Alborch abandone la carrera electoral de las primarias. Es una persona con solvencia y simpatía. Luego puede ganar o no, pero la dirección tiene que alentar a la participación". Perales dijo que igual ocurre en el caso de independientes que se ven huérfanos de apoyos internos: "El hecho de que los militantes elijan no libera de responsabilidad a las direcciones. Hay buenos candidatos que son independientes que no tienen el apoyo de grupos del partido y a esas personas tiene que prestarle su apoyo, porque si no están evitando que no sean candidatos". Aunque Perales precisó que sus declaraciones no iban dirigidas a ninguna dirección en Andalucía, hay dos casos que sí coinciden con su exposición: el de José María Martín Delgado en Málaga y el de la consejera de Cultura, Carmen Calvo, en Córdoba. Furor El responsable de Política Municipal indicó que la ejecutiva federal ha advertido a las agrupaciones de ciudades de menos de 50.000 habitantes que "no es posible" celebrar primarias en todos las localidades y que sólo se autorizará abrir elecciones internas en algunos casos concretos. "Las primarias tienen sentido en sitios donde hay muchos habitantes y afiliados, pero queremos disuadir a las organizaciones". En los meses de octubre y febrero próximos está previsto abrir una nueva ronda de primarias a las que concurrirán los candidatos que ahora son alcaldes o presidentes de comunidad y será entonces cuando las agrupaciones que lo han solicitado podrán acogerse a esta fórmula. Por otro lado, Perales mostró su escepticismo acerca de que en Andalucía se produzca un acuerdo similar al alcanzado en Madrid con el Partido Democrático de la Nueva Izquierda (PDNI). Afirmó que la dirección federal trasladó a la andaluza los nombres propuestos por la formación que preside Cristina Almeida para encabezar las candidaturas de Córdoba (Manuel Pérez) y Cádiz (Jerónimo Andreu). Los dos, dijo, son personas de "solvencia", pero la dirección regional ya ha dado por cerrado el asunto. "No hay posibilidad de llegar a acuerdos en cabeceras de listas", dijo Perales, quien, sin mucho convencimiento dejó abierta la puerta a un pacto en Córdoba en el caso de que el aspirante fuera el ex alcalde Herminio Trigo. "Hay un proceso de primarias ya iniciado y cada día que pasa los márgenes son menores", comentó. El dirigente socialista recordó que las direcciones regionales tienen manos libres para decidir la política de alianzas municipales y que el acuerdo con el PDNI en Madrid "no es de obligado cumplimiento".