Malestar

Estando aún reciente la polémica suscitada por un presumible trato de favor hacia la hija del presidente del Gobierno español por parte de la compañía Iberia, los pasajeros del vuelo IB-0761, del 4 de mayo de 1998, nos sentimos discriminados y ofendidos por la actuación de Iberia.El mencionado vuelo tenía su hora de salida del aeropuerto de Palma de Mallorca a las 17.15, pero aproximadamente a las 17.00 el avión que llegó al aeropuerto mallorquín para realizar dicho vuelo fue desviado a otro aparcamiento, con el fin de realizar el vuelo a Madrid de las 13.30, el cual, al parecer por causas técnicas, había sido retrasado.

Nuestro malestar no es porque se diera servicio a los pasajeros que habían estado en la terminal desde las 13.30, sino por la actitud del personal de Iberia, especialmente de sus responsables, que en ningún momento dieron explicaciones de las acciones que se estaban tomando para paliar la situación. Pasadas las 19.00, y sin aviso a la totalidad del pasaje, intentaron embarcar, de una forma chapucera, a un número reducido de pasajeros en vuelos de las compañías Spanair y Air Europa.

Entendemos que se produzcan averías en una aeronave que impidan su despacho, pero que siete horas después de haberse producido el problema, en una aeronave de reducida capacidad como es la del MD-88, éste siga sin ser resuelto, dice muy poco a favor de la capacidad de gestión de Iberia o que hay que ser persona influyente para que en menos de 30 minutos se realice un cambio de aeronave como en el caso mencionado al inicio de esta carta.-