De pensiones, puentes y fenómenos paranormales
Los archivos municipales tienen tres tipos de usuarios: la propia Administración, los ciudadanos y los investigadores. El archivo de Madrid capital, por ejemplo, recibió 16.000 visitas el año pasado, y el de Coslada, 2.000. ¿Qué pregunta el vecino de a pie? Sus consultas más frecuentes son sobre planos o licencias municipales. Pero hay de todo.Uno de los casos más curiosos comentado por un archivero es el de una mujer que acudió a él convencida de que su casa era escenario de fenómenos paranormales y quería saber qué hubo antaño allí. El archivero indagó con el ánimo de tranquilizarla. Y averiguó que allí hubo un santuario ibérico, en el siglo II antes de Cristo, y un hospital de campaña, en el que murió mucha gente durante la guerra civil. En Alcobendas piden mucho el acta del milagro de la Virgen de la Paz, un documento de 1967 que recoge las versiones de los testigos sobre un convite a vino en el que la tinaja del párroco no se vaciaba nunca.
De las 27 poblaciones madrileñas de más de 10.000 habitantes, 22 tienen archivero, una figura muy rentable. El archivero de Arganda, Julio Cerda, comenta: "Hace unos años, Rivas-Vaciamadrid reclamó la propiedad del puente de Arganda. A las ocho de la mañana me llamó el alcalde y me dijo: "Busca pruebas de que no es cierto". A las once las tenía en su mesa". Un argandeño pudo incrementar su jubilación gracias a que el archivero localizó su parte de admisión en un hospital en 1958: le estalló una bomba, perdió una pierna y tenía derecho a un plus por ser mutilado de guerra. José María Nogales, archivero de Alcalá, abunda en la importancia de los documentos: "Varias ciudades reclaman ser la cuna de Cervantes, pero nosotros tenemos la partida de bautismo del escritor".
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