Farnós coloca a cuatro personas afines al PP en la inspección sanitaria

El Consejero de Sanidad, Joaquín Farnós, ha colocado como inspectores de Sanidad en la dirección territorial de Castellón a cuatro personas vinculadas al PP, una de ellas concejal en Torreblanca. Entre estos nombramientos destaca el de Salvador Comes, al que el PP ha designado para el puesto de máxima responsabilidad en la inspección médica. Salvador Comes figuraba en el puesto número 11 de la lista popular en Burriana.

Comes, que finalmente no fue elegido concejal puesto que en Burriana los populares obtuvieron diez ediles, ha estado contratado por el mismo Ayuntamiento para controlar el abstentismo entre los funcionarios, pero hasta ahora no mantenía relación con el Servei Valencià de Salut (SVS). La contratación por el equipo de gobierno del PP y UPV se produjo sin la fiscalización de la oposición debido a que la contraprestación no superaba las 500.000 pesetas anuales. Hasta esta última designación, el puesto de coordinador de la inspección médica, plaza que se sitúa en el tercer puesto del escalafón en los cargos de la dirección territorial, era ocupado por uno de los inspectores de la misma. Además, se recurría para el nombramiento a uno de aquellos que ocupaban el puesto como funcionarios de carrera. En alguna ocasión la jefatura de inspección ha sido ocupada, temporalmente, por alguno de los inspectores que estaba contratado como interino, pero nunca había sido designado un médico que no fuera inspector. Sin embargo, ahora, el PP ha recurrido a una persona de fuera del SVS que no cumple siquiera con los requisitios fijados para ocupar esta plaza, que determinan la necesidad de ser médico inspector y tener dos años de experiencia. En la provincia de Castellón existen nueve inspectores médicos, además de los tres que han sido nombrados recientemente. La primera de estas tres contrataciones recayó en la hija de María Luisa Ribes, concejal del PP en el Ayuntamiento de Castellón, quien anteriormente había estado trabajando en Cruz Roja. Posteriormente, los servicios territoriales de Sanidad contrataron a la edil delegada de Sanidad y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Torreblanca, María Dolores Franch, que ocupaba el segundo puesto en la lista del PP para las últimas elecciones. Ésta desempeña sus funciones de inspección en el hospital General de Castellón y es la única que tienen asignada un área determinada. La tercera vacante de inspector de Sanidad está ocupada por Rosa Ana Company, que encabezaba la lista de los populares en Sumacárcel y que no resultó elegida. En este caso, la inspectora está contratada y nombrada en Castellón, aunque aún no ha acudido a la dirección territorial. Estas cuatro personas han sido contratadas por libre designación sin que haya habido publicidad ni difusión de las vacantes a cubrir ni concurso de méritos. Ni siquiera el puesto de coordinador de inspectores es de libre designación ya que se incluye en el cuerpo de administración especial. Además, tampoco se ha optado por recurrir a la bolsa de trabajo, según han indicado fuentes de la Asociación de Inspectores de Castellón. Este colectivo ha presentado tres denuncias. La primera de ellas se remitió al Síndic de Greuges, la segunda al director general de Función Pública y la tercera a la Inspección General de Servicios. Los escritos fueron enviados el mes pasado aunque la asociación no ha recibido todavía contestación alguna. Los inspectores de Sanidad solicitan en sus denuncias que se explique la fórmula que se ha llevado a cabo para efectuar estos cuatro nombramientos. Además, consideran que éstos han supuesto un agravio para el resto de profesionales y manifiestan su malestar por el procedimiento seguido, sobre todo en el caso del coordinador de inspectores. Las mismas fuentes han indicado que lo que el colectivo quiere denominar "consultas" son sólo un primer paso y que se encuentra a la espera de alguna respuesta. Este periódico intentó ayer, sin éxito, conocer la versión de la Consejería de Sanidad.