El regalo del general Perón
El objeto más preciado de Lucas Sainz, un ingeniero de Caminos de 52 años, es su guitarra Fender Stratocaster de 1961. Se la trajo de Nueva York un amigo de su padre y con ella grabó su primer elepé con Los Pekenikes, el grupo madrileño que se convirtió en rey absoluto de la música pop instrumental de la década de los sesenta. La guitarra es una pieza de colección por la que le han llegado a ofrecer hasta un millón de pesetas. Casado y con tres hijos, a Lucas Sainz se le puede ver de vez en cuando en el Rock & Roll Café -un local en el centro comercial de La Moraleja, urbanización de Alcobendas en la que reside- aferrado a su viejo instrumento, tocando para quitarse el mono.Su colega de los viejos tiempos, bajista de Los Pekenikes, Ignacio Martín Sequeros, conserva otra del modelo jazz-bass. Cuenta que el dictador argentino Juan Domingo Perón les contrató para que actuaran en una fiesta que dio en su casa madrileña en 1962. "Se lo pasó tan bien que al final me regaló la guitarra", recuerda el músico.
