Zaplana defiende el protagonismo de la antigua Corona de Aragón en la UE sin "ideas artificiales"

El presidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, reivindicó ayer el protagonismo de la antigua Corona de Aragón en la construcción europea y abogó por estrechar los vínculos entre estos territorios para "hacer" un futuro común "sin manipular la historia" y "partiendo de cosas ciertas y no de ideas artificiales". El 700 aniversario del monasterio de La Valldigna fue el pretexto para convocar en Valencia a representantes de la antigua Corona. Los presidentes de Aragón y Baleares, Santiago Lanuza y Jaume Matas, respectivamente, ambos del PP, fueron los invitados de mayor relevancia política.

En una calurosa mañana, el Palau de la Generalitat vistió sus mejores galas para recibir a los representantes políticos y culturales de municipios franceses como Montpellier o Perpiñán y de consejos como Lenguadoc-Rossillon, entre otros; de ciudades italianas como Palermo o L"Alguer, y regiones como Sicilia; e incluso de Malta y de Grecia. "Hemos querido rendir homenaje a los que hoy formamos países y regiones diversas, pero que en algún momento tuvimos vínculos institucionales y culturales y que además continuamos teniéndolos por el proyecto común europeo", afirmó Zaplana en referencia a la antigua Corona de Aragón. Los asistentes firmaron una declaración de adhesión a la conmemoración del Real Monasterio de Santa Maria de La Valldigna, fundado por el rey Jaume II, el Just. En su discurso, íntegramente en castellano -al igual que la corta intervención del consejero de Cultura, Francisco Camps-, el titular del Consell rescató la idea del protagonismo de la Comunidad Valenciana en el arco mediterráneo que había quedado en el ostracismo. Para ello Zaplana eligió el auditorio, haciendo hincapié en la construcción europea, "la que permite que los ciudadanos nos veamos en un proyecto compartido desde la historia y no desde la imposición". La Corona de Aragón "creó vínculos fuertes entre todos los integrantes sin recurrir a la imposición de un código legal o una lengua", explicó Zaplana. "Pese a hablar lenguas distintas", añadió, " nuestros pueblos han evolucionado a la lo largo de la historia de tal manera, que ninguno de nosotros, cuando visitamos nuestras respectivas tierras, se encuentra con espacios ni semblantes extraños". Por la tarde, los invitados, a excepción de los presidentes de Aragón, Baleares y Valencia, visitaron el monasterio, que se encuentra en vías de rehabilitación, informa Eva Batalla. La directora general de Patrimonio, Carmen Pérez, explicó que, desde que el PP accedió al poder, se está recuperando el conjunto histórico a pesar del aspecto ruinoso que aún presenta.