"Mínima incidencia en el medio ambiente"

El Gobierno remitió el pasado 12 de enero al diputado de Nueva Izquierda Manuel Alcaraz el "informe que eleva el ministro de Defensa a la Junta de Defensa Nacional sobre la ubicación de un polígono de entrenamiento para el Ejército del Aire". El documento, de cuatro folios de extensión, firmado el 30 de junio de 1988 por el entonces titular de Defensa, Narcís Serra, fue negado al Tribunal Supremo debido a su carácter secreto.Sólo después de su desclasificación, dentro del proceso administrativo de derogación del decreto sobre Anchuras, se ha revelado su contenido."En fecha próxima, 20 de junio del año en curso, el Estado Mayor del Ejército del Aire ha elevado una propuesta de emplazamiento del polígono, tras el estudio de alternativas diferentes, identificando su espacio en las siguientes coordenadas geográficas", comienza el informe. "Este espacio, de una extensión aproximada de 6.750 hectáreas, cumple con los criterios técnicos predeterminados por el Estado Mayor y no tiene dentro de sus límites núcleo urbano alguno, estimándose mínima la incidencia que pudiera tener en el medio ambiente, conclusión obtenida de las experiencias extraidas de polígonos de entrenamiento análogos, singularmente Bardenas Reales", agrega. "Las poblaciones de sus inmediaciones, Anchuras, Gamonoso, Sevilleja de la Jara y Minas de Santa Quiteria (de las provincias de Ciudad Real y Toledo) se encuentran alejadas del emplazamiento por una distancia de seguridad bastante que prácticamente imposibilita que se vean afectadas por los ejercicios que se realicen. Dentro de este espacio, con grandes extensiones roturadas, existen lugares idóneos para el asentamiento de la zona de blancos y la infraestructura que el polígono requiere, siendo mínima también la incidencia de ocupación, habida cuenta las caracterísiticas de las explotaciones agrarias y forestales de la zona", asegura el documento.

El informe señalaba dos procedimientos para hacerse con la propiedad de la zona -"acudir a una expropiación forzosa que permita su urgente ocupación o negociar con los distintos propietarios la compra u otro modo de adquisición"-, recomendando el segundo, "al menos en una primera fase".

Sin embargo, no todo el expediente sobre Anchuras se ha hecho público: "el estudio de la División de Planes del Ejército del Aire en el que se contienen los criterios técnicos que han de evaluarse en la elección del emplazamiento", que acompañaba como anexo al informe de Narcís Serra, sigue clasificado como secreto, según la respuesta que recibió el diputado Manuel Alcaraz el pasado 12 de marzo, después de reclamarlo.