ETA no atacaba a un guardia civil desde mayo de 1997
ETA no atacaba a un guardia civil desde la noche del 3 de mayo de 1997, cuando un terrorista entró en un bar de Zierbana (Vizcaya) y disparó contra el agente José Manuel García Fernández, de 43 años, casado y sin hijos. Aquel atentado supuso la víctima mortal número 195 de la Guardia Civil desde que ETA empezó a matar en 1968.El subteniente Alfonso Parada es la quinta víctima mortal de ETA en lo que va de año. Durante 1998, la banda terrorista ha asesinado a otras cuatro personas, la última de ellas el concejal Tomás Caballero, asesinado hace tan sólo tres días. La primera víctima fue el concejal del PP en Zarautz (Guipúzcoa) José Ignacio Iruretagoyena, muerto el 9 de enero al estallar una bomba colocada bajo el asiento de su vehículo. El 30 de enero fueron asesinados a tiros en Sevilla el concejal del PP en el ayuntamiento de esta ciudad Alberto Becerril y su esposa Ascensión García.
ETA también ha realizado otras actividades terroristas durante 1998, que provocaron daños materiales y heridas leves a tres personas. El 10 de enero explotó en un buzón de Vitoria una carta bomba dirigida contra un militar que ocasionó heridas leves a una mujer y a un niño. El 27 de enero estalló una bomba-lapa adosada a los bajos de una furgoneta del concejal del PP en Santa Cruz de Campezo (Álava) Fernando Visa Landa. El 25 de febrero ETA colocó una bomba junto al vehículo particular de un militar, pero el artefacto fue neutralizado. En la madrugada del 1 de abril estallaron cuatro bombas junto a domicilios de cargos del PP o familiares suyos en Guipúzcoa, provocando un herido leve y numerosos daños materiales.
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