Aragón reconoce que recibió decenas de millones en "regalos" de constructoras

Antonio Aragón, ex consejero de Obras Públicas del Gobierno de Navarra que presidía el socialista Gabriel Urralburu, reconoció ayer ante la Audiencia Provincial de Pamplona que recibió en concepto de "regalo" decenas de millones de pesetas de las constructoras a las que adjudicaba contratos. El procesado, para el que se piden once años de prisión por un delito de cohecho continuado y dos contra la Hacienda foral, pretendió convencer al tribunal de que las adjudicaciones se realizaron bajo la más estricta legalidad.

Un informe pericial encargado por el juzgado que investigó la causa le atribuye unos 71 millones en comisiones ilegales. Aragón arguyó que no existía relación de causa-efecto entre la adjudicación de la obra y los regalos. El ex dirigente socialista pidió perdón a la sociedad navarra, dijo sentirse arrepentido por sus errores y prometió que devolvería el dinero cuando pueda. Aragón protegió a su esposa, al ex presidente socialista Gabriel Urralburu y al resto de los procesados, salvo a Jorge Esparza, al que involucró en la entrega de las dádivas. "Nunca comenté esos regalos a mi presidente", aseguró. Los dos compraron pisos en las mismas urbanizaciones y tenían cuentas en el mismo banco suizo que Luis Roldán.El juicio sobre la denominada trama navarra del caso Roldán se reinició con la declaración de Aragón un mes después de que el tribunal rechazara todas las cuestiones previas planteadas por las defensas de los seis procesados. Junto a Aragón se sientan en el banquillo, Urralburu, ex presidente de Navarra, para el que se pide la misma pena por idénticos delitos, las esposas de ambos, Isabel Romeo y Olivia Balda; Roldán y su testaferro Esparza.

A preguntas del fiscal, Aragón explicó así los "regalos" que recibía de las constructoras: "Después de un escrupuloso procedimiento en la adjudicación de las obras yo acepté regalos en forma de dinero por medio del señor Esparza. Me sentía ofuscado porque estaba amenazado por ETA y no le di la importancia que tenía. Sin embargo, después de reflexionar, mi mala conciencia hizo que sufriera muchísimo y agravó mi enfermedad. Estoy arrepentido de haber recibido esto. Nunca debí aceptarlo y nunca se debería repetir". Pero insistió en su "legal e impecable" gestión. "Esparza me daba los regalos en forma de dinero y me decía que en aquella época era práctica habitual agradecer así a las administraciones. Me pilló en un mal momento, acepté y lo utilicé para comprar varios inmuebles". Dos chalés en Rota (Cádiz), un piso en Madrid y un apartamento en Palma de Mallorca se escrituraron a nombre de una sociedad patrimonial que le creó Esparza.

Nada más tomar posesión de su cargo, Aragón modificó el sistema de subasta por el de concurso para realizar las contrataciones de su consejería. Reconoció que aceptó incrementar el precio de la obra de un tramo de la autovía de Leizarán en un 20% porque las empresas (Lain y Obrascón) querían dejarla por las amenazas de ETA.

Ruina económica y anímica

Aragón declaró ayer ante el tribunal que está "en la ruina económica y anímica". "No tengo trabajo y me mantienen mis padres y mis suegros", explicó. Los informes periciales demuestran que Urralburu y Aragón cobraron casi 200 millones en comisiones ilegales. En las cuentas suizas de ambos había depositados al menos 400 millones que han desaparecido. Pese a su supuesto arrepentimiento, Aragón no desveló dónde se encuentra el botín.Reconoció ser titular, junto con su esposa, de una cuenta en Suiza pero aseguró que no eran para su uso personal. Incurrió en múltiples contradicciones y sugirió que había entregado una carta a una persona de su confianza en la que desvelaba para quién era ese dinero.