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Gabilondo: "Hay periodistas que han juzgado, sentenciado, fusilado y enterrado"

"En este país ha habido periodistas que han juzgado, sentenciado, fusilado y enterrado. Y eso no es sano", denunció ayer en Sevilla Iñaki Gabilondo, de la Cadena SER, quien en el transcurso de unas jornadas sobre los efectos de los juicios paralelos, reclamó a la prensa "más prudencia y delicadeza". No obstante, el presidente de la Audiencia de Sevilla, Miguel Carmona, extendió la responsabilidad de alentar juicios populares más allá de los periodistas. "También hay notas oficiales que ya dicen quién es el culpable", recordó.

El caso del anestesista de Valencia, culpabilizado públicamente por inducir el contagio del brote de hepatitis C, sin que ninguna sentencia lo haya dictaminado así aún, es paradigmático sobre los abusos de los poderes públicos y su celeridad en descargar culpabilidades. "Lo escandaloso es que la autoridad sanitaria haya difundido el nombre del anestesista", advirtió el catedrático Javier Pérez Royo, director de las segundas jornadas sobre medios de comunicación y sistema constitucional organizadas por la Universidad de Sevilla y la Fundación El Monte. No obstante, la coresponsabilidad de otros agentes sociales en la inducción de juicios paralelos no descarga la responsabilidad de la prensa. Iñaki Gabilondo se mostró rotundo: "Si los medios dictan veredictos de culpabilidad, ¿para qué queremos el Estado de Derecho?", preguntó Gabilondo tras trazar una línea clara que separa ya en la prensa española a quienes miman el sistema democrático "porque lo hemos defendido siempre" de quienes "sólo lo manosean porque lo han defendido menos". El director de Abc en Sevilla, Manuel Ramírez, se mostró de acuerdo. "Yo también soy prudente", dijo. "Pero hay quien se cree esa tontería de que los periodistas somos los amos del mundo", agregó. Ramírez citó el caso Arny como un ejemplo "bastante sangrante y desagradable" de juicio paralelo desbordado por alguna prensa. "El padre de un testigo numerado me ofreció una lista para comprársela. Yo le contesté: "Me gustaría que su hijo fuera huérfano". Su respuesta fue peor aún: "No se preocupe. Si no me la compra usted, otro me la comprará", narró. La sesión de ayer de las jornadas estaba dedicada a discernir cómo afectan los juicios mediáticos sobre el jurado popular, un tipo posible de influencia no investigada aún en España. María Teresa Fernández de la Vega, diputada del PSOE, especuló que, quizá, los juicios mediáticos puedan afectar más al juez profesional que al jurado anónimo. "El juez técnico también lee noticias, no puede ser aislado, como el popular, y además arriesga su prestigio. Pero el problema es cómo podemos proteger a ambos", subrayó. Gabilondo, que confesó poseer una lista de damnificados de juicios mediáticos a los que conoce personalmente, avisó que los juicios populares han originado "miedo" de los ciudadanos a los medios. "Porque los medios rompieron hace tiempo los límites".

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