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Yeltsin confirma a los "barones" del Gobierno

El presidente ruso, Borís Yeltsin, reafirmó ayer su voluntad de continuar la política de reformas económicas al firmar los primeros decretos nombrando a los nuevos miembros del flamante Gabinete que encabeza Serguéi Kiriyenko. Como se esperaba, conservaron sus puestos tanto el vicejefe de Gobierno Borís Nemtsov como el ministro de Finanzas Mijaíl Zadórnov. Los primeros nombramientos se produjeron después de la reunión que mantuvo Kiriyenko con Yeltsin. Se espera que mañana el primer ministro y el presidente den forma a la estructura definitiva del Gobierno.

Más de una hora duró la reunión entre Kiriyenko y Yeltsin en Gorki-9, la residencia que el presidente tiene al oeste de Moscú. La continuidad en las reformas irá acompañada de una continuidad en la política exterior y de defensa, como lo demuestra el que Yevgueni Primakov y el mariscal Ígor Serguéiev fueran confirmados a la cabeza de los correspondientes ministerios. También Serguéi Stepashin fue ratificado en Interior y Serguéi Shoigu como ministro para Situaciones de Emergencia. La única sorpresa que salió de Gorki-9 fue el nombramiento de Víktor Jristenko como vicejefe de Gobierno. Jristenko es un siberiano de 40 años de edad que hizo toda su carrera en Cheliábinsk. Diplomado del Instituto Politécnico de esa ciudad, empezó su actividad política en los últimos años de la perestroika . Elegido diputado de la asamblea urbana de Cheliábinsk en 1990, pasó después a la alcaldía . A fines del año siguiente ya es vicegobernador . En 1995, en vísperas de las elecciones parlamentarias, estuvo entre los fundadores de la filial provincial del movimiento progubernamental Nuestra Casa es Rusia (NCR). Al año siguiente fue apoderado de Borís Yeltsin en Cheliábinsk durante la campaña electoral presidencial.

Antes de ser llamado a Moscú en verano del año pasado como viceministro de Finanzas, desempeñó el cargo de representante plenipotenciario del presidente Yeltsin en Cheliábinsk. Aparentemente, es un hombre cercano a la Administración presidencial .

Se espera que el jueves, cuando Kiriyenko se reúna nuevamente con Yeltsin, surgirá una serie de nuevos personajes en el Gobierno. Los diputados que el viernes, para evitar la disolución de la Duma Estatal y la convocatoria de elecciones parlamentarias anticipadas, se vieron obligados a aprobar a Kiriyenko como primer ministro, quisieran ver a miembros de sus partidos en el nuevo Gobierno.

Alexandr Shojin, jefe de la fracción Nuestra Casa es Rusia en la Cámara baja del Parlamento, dijo que su movimiento había presentado una lista con los candidatos que quería ver en el Gabinete. «El movimiento NCR espera obtener una serie de puestos clave en el Gobierno a cambio de nuestro líder, Víktor Chernomirdin», que fue destituido sorpresivamente el 23 de marzo, señaló Shojin. Jristenko, por cierto, es miembro del Consejo Político de NCR. NCR quiere ver como ministro-jefe del aparato del Gobierno al diputado Alexéi Golovkov, vicepresidente del Comité de Presupuesto de la Duma Estatal.

Shojin no sólo desea a miembros de su movimiento en el Gobierno, sino también al menos a un representante de la oposición para así neutralizar a los diputados que quieren plantear un voto de censura contra el Gobierno en el futuro próximo.

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Recorte en los vicejefes

La nueva estructura de Gobierno elimina los cargos de primeros vicejefes de Gobierno -puestos que, por lo demás, no estaban contemplados en la Ley de Gabinete de Ministros- y deja sólo tres viceprimeros ministros, lo que significa un recorte de casi dos tercios, según explicó Nemtsov. La confirmación de éste como el segundo de Kiriyenko se produjo a pesar de los rumores que le colocaban fuera. Pero su salida del Gabinete, sobre todo después de la destitución de Anatoli Chubáis ocurrida el mes pasado, hubiera sido interpretada como un cambio serio en la política de Yeltsin.

El Kremlin desmintió ayer que problemas de hígado impidan a Yeltsin beber, pero reveló que el presidente ruso prefiere ahora el vino tinto a la vodka. «En el tiempo que llevo trabajando con el presidente, nunca ha tenido problemas hepáticos. Los doctores no le han prohibido beber vino y, por ejemplo, hoy se tomó un vaso de tinto durante un desayuno de trabajo», declaró Serguéi Yastrzhembski, el jefe de prensa del presidente ruso.

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