Coulthard frustra el acoso de Schumacher

Esta vez Michael Schumacher no pudo evitar el dominio, de principio a fin, del McLaren de David Coulthard. El líder de Ferrari no pudo repetir el éxito que obtuvo en Argentina aunque acabó pisándole los talones al McLaren del piloto escocés. Los millares de hinchas de los bólidos rojos que se dieron cita en el circuito de Imola para presenciar el Gran Premio de San Marino disfrutaron de lo lindo con la presión que Schumacher sometió a Coulthard pero éste supo administrar los 20 de segundos de ventaja que llegó a acumular después de la segunda parada en boxes. No pudo Schumacher consumar su objetivo ni poner punto y final a los 15 años de sequía de victorias de la Scuderia en Imola. Lo acontecido en el circuito italiano estrecha las diferencias en la cabeza del Mundial y provoca una enorme expectación por cuanto pueda acontecer en la quinta prueba puntuable para el campeonato, el próximo 10 de mayo en el circuito de Cataluña. El finlandés Mika Hakkinen mantiene su liderato pero ahora sólo con tres puntos de ventaja respecto a su compañero de McLaren, Coulthard, y seis puntos sobre Schumacher. Tres pilotos en un pañuelo. Y es que el McLaren de Hakinen, que hasta ahora parecía indestructible, fue víctima de su mecánica. La caja de cambios empezó a darle problemas en la 14ª vuelta y se quedó sin la cuarta velocidad. Tuvo que abandonar por vez primera esta temporada.

Coulthard, que había partido desde la pole-position , fue el primero de los pilotos de cabeza en parar por segunda vez. Lo hizo en la vuelta 44, seguido del irlandés Eddie Irvine (Ferrari) y del canadiense Jacques Villeneuve (Williams). Cuando Coulthard volvió a la pista lo hizo con un segundo de ventaja respecto a Schumacher, que al no poder superar al escocés dedidió también efectuar su segunda parada. Cuando volvió a la pista lo hizo a 20 segundos de Coulthard. Schumacher intentó sacar al final el máximo rendimiento a su Ferrari, que por vez primera corrió una carrera con los alerones laterales. El alemán rebajó la diferencia con Coulthard a un ritmo de un segundo por vuelta.

El escocés administró su ventaja sobre el Ferrari, que acabó a cuatro segundos del McLaren. Irvine, bien apoyado por sus mecánicos, realizó una buena carrera y se ganó el derecho a subir al podio. Todo lo contrario que Villeneuve y el alemán Heinz-Harald Frentzen, cuarto y quinto, pero los pilotos de Williams se beneficiaron de los abandonos de Hakkinen y de los Benetton, al igual que el francés Jean Alesi (Sauber), que logró puntuar por segunda vez consecutiva.