Libia procesa a seis altos cargos de EE UU por el bombardeo de 1986
La Justicia libia ha abierto un proceso contra seis colaboradores del ex presidente estadounidense Ronald Reagan. Son juzgados en rebeldía en un proceso que Estados Unidos no duda en calificar de burdo simulacro. Se les acusa de estar implicados en el bombardeo "deliberado y premeditado" del 15 de abril de 1986 contra Trípoli y Bengasi, con un balance de 41 muertos -entre ellos, una hija del líder libio, Muammar el Gaddafi- y 266 heridos. Aquella acción militar fue la respuesta a un atentado terrorista contra una discoteca frecuentada por soldados norteamericanos en Berlín.Entre los inculpados destacan cuatro: John Poindexter, que fue jefe del Consejo de Seguridad Nacional; Oliver North, implicado después en el caso Irán-Contra (desvío ilegal de fondos para financiar a los grupos antisandinistas); William Casey, ex jefe de la CIA, y el almirante Frank Kreso, comandante en jefe de la VI Flota en el momento del ataque.
Los acusados fueron defendidos en la primera audiencia por unos abogados de oficio libios. El fiscal general de este país del norte de África, Nouri Saoud, que preside el tribunal, fijó para el 23 de septiembre la segunda audiencia con el fin de "informar a los acusados" de los delitos que se les imputan.
Libia mantiene desde hace años un duro pugilato político, diplomático y judicial con Estados Unidos y el Reino Unido, cuyos Gobiernos acusan a los servicios secretos libios de estar implicados en el atentado contra un Boeing 747 de la Pan Am en 1989, que estalló sobre la localidad escocesa de Lockerbie. Murieron todos sus ocupantes: 270 personas.
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