380 objetores de conciencia prestarán servicio en la Policía Municipal en misiones de calle

Un silbato, un chaleco y a la calle. Un total de 380 objetores de conciencia se inorporará este año por primera vez a la Policía Municipal de Madrid. Esta tropa de refresco, será adscrita a las Unidades de Vigilancia Administrativa, dedicadas a velar por el cumplimiento de las ordenanzas y licencias municipales, así como a prestar servicio de policía de barrio. En su apoyo, los objetores, que patrullarán en parejas o tríos, atenderán "los problemas de los barrios" auxiliarán a los vecinos, visitarán escuelas y elaborarán partes sobre daños al mobiliario urbano, vehículos abandonados, pintadas, contenedores, suciedad ... Actividad de la que derivarán tanto sanciones como actuaciones policiales.

Nada más pisar las dependencias municipales, los objetores se incorporarán a la disciplina policial.Primero, según la orden interna que regula su incorporación, serán distribuidos entre las nueve unidades de Vigilancia Administrativa en turnos de mañana (de 8.00 a 14.00) y tarde (15.30 a 21.30). En cada unidad se formarán 20 equipos, identificados con un número y compuestos cada uno por dos o tres jóvenes.

Su trabajo será supervisado por los mandos. Éstos les asignarán misiones, les entrenarán para las mismas y nombrarán por cada unidad y turno un coordinador para que cumpla la función de interlocutor de la superioridad.

A la hora de determinar las tareas de los objetores, la dirección de la Policía Municipal ha escogido un modelo alejado de los servicios duros.

Funciones auxiliares

"No regularán el tráfico, sino que tendrán funciones auxiliares, por ejemplo de observadores o de información al ciudadano sobre los servicios municipales. También ayudarán a las salidas del colegio para que los niños crucen sin peligro e informarán a los agentes sobre deficiencias en la vía pública o sobre contenedores mal situados...", señaló el director de servicios de la Policía Municipal, José Manuel Morales.UGT, en cambio, expresó sus temores sobre las patrullas de objetores: "Falta definir más sus funciones. Por ejemplo, no está claro si, regularán el tráfico o no. También constituye un peligro lanzarlos a la calle. No están suficientemente, formados y esto puede entrañar riesgos para ellos"., Antes de pisar el asfalto, el Ayuntamiento proporcionará a los objetores material de combate: chalecos y brazaletes (con la inscripción Ayuntamiento de Madrid-Prestación Social Sustitutoria), así como un portadocumentos con callejero y silbato.

Una vez equipados y en sus puestos, los objetores se presentarán al pase de lista (de mañana o tarde) donde se les instruirá sobre su cometido del día. Si durante su servicio descubren alguna incidencia especial (sea un delito o una urgencia) deberán identificarse por su número y ponerse en contacto inmediato con la emisora central para que acuda la policía.

El resto de infracciones a las normas municipales quedará plasmado, al final de cada jornada, en un "parte de servicios e incidencias del día", que será entregado al coordinador, quien a su vez lo facilitará al mando policial.

Estas incidencias, de las que pueden derivar multas, serán notificadas a la Junta Municipal de Distrito o a la Jefatura de la Policía Municipal.