Atutxa coordinará a la Ertzaintza con policías y con escoltas privados del PP

El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, y el consejero Juan María Atutxa han sellado un acuerdo para garantizar la seguridad de los cargos públicos del PP, en el que tienen cabida la Ertzaintza, la seguridad privada y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La policía vasca se hará cargo de las escoltas, tarea en la que también participarán, de forma limitada, las empresas de seguridad privada, mientras que las Fuerzas de Seguridad del Estado seguirán con sus labores de contravigilancia.

El acuerdo garantiza al Gobierno vasco la coordinación de todos los cuerpos policiales, y la transitoriedad de la medida hasta que la Ertzaintza pueda hacerse cargo de todo el trabajo. El viceconsejero de Seguridad, José Manuel Martiarena, explicó ayer en los pasillos del Parlamento vasco que todo lo relacionado con la contravigilancia está ya solucionado."Ahora", quince días después de una agria y sostenida polémica entre el ministerio y la Consejería de Interior, "se está aplicando el sistema de seguridad de una manera ordenada y coordinada por el Gobierno vasco". Aunque no precisó los porcentajes de agentes de cada cuerpo que trabajan en la seguridad de los cargos públicos del Partido Popular, dijo que el sistema ha quedado muy claro. "Lo importante es que conocemos la ubicación de cada agente, sea del cuerpo que sea, y si nosotros lo conocemos, el resto de los cuerpos nos lo pueden preguntar", señaló.

Según el viceconsejero de Seguridad, el ministerio y la consejería están trabajando ahora en la ampliación de la Ertzaintza y en concretar la presencia de la policía vasca en el puesto fronterizo de Biriatou. Para Martiarena, la ampliación de la Ertzaintza le permitirá afrontar la seguridad de los cargos del Partido Popular y del resto de las personas amenazadas por ETA.

500 agentes más

Interior está negociando la puesta en marcha de una nueva promoción de 500 agentes, que situaría a la Ertzaintza en torno a los 8.000 agentes. Además, la academia de la policía autonómica vasca en Arkaute (Álava), tenía previsto formar a 60 escoltas en 1998, uña cifra que ha sido ampliada a 160 por la demanda de ese servicio "En este momento tenemos que trabajar todos los cuerpos policiales, porque las demandas del PP superan la disponibilidad de la Ertzaintza", reconoció Martiarena."La ventaja es que ahora lo vamos a hacer de manera ordenada y con conocimiento. Lo preocupante es que nosotros no sabíamos nada, cuando la competencia en materia de seguridad ciudadana es nuestra", añadió.

El acuerdo, que se está poniendo en práctica desde hace unos 15 días, consiste en que la escolta a los cargos políticos vascos que dependan de órganos políticos y administrativos estatales, como diputados o senadores, reciben protección de las Fuerzas de Seguridad del Estado. El resto de las escoltas corren a cargo de la policía autonómica, con las aportaciones de empresas privadas de seguridad.

"Espero que con este acuerdo pongamos fin a un debate desgraciado", concluyó ayer Martiarena.