Repsol trasladará a Móstoles su centro tecnológico de la calle de Embajadores

La compañía Repsol desembarcó ayer en Móstoles (196.500 habitantes). Todos los grupos políticos municipales le dieron, en un pleno extraordinario, el beneplácito para levantar un centro de investigación y desarrollo en la localidad. Servirá para aglutinar los servicios que ahora presta la factoría en el número 183 de la calle de Embajadores de la capital, que se está quedando "obsoleta", según sus responsales. La idea municipal es crear un parque industrial con empresas punteras de todo mundo. Al primer ofrecimiento de suelo sólo ha respondido Repsol.

Según el plan de colaboración suscrito con el Consistorio, Repsol invertirá 9.500 millones de pesetas para tener listas sus nuevas instalaciones en tres años. El Ayuntamiento, por su parte, costeará los gastos de expropiación de las 19 hectáreas de terreno rústico, que después se recalificarán como urbano y terciarlo. El alcalde de Móstoles, José María Arteta, del PSOE, anunció que el Gobierno regional va a pagar una parte de los costes de expropiación, estimados en 500 pesetas el metro cuadrado.El centro de investigación y desarrollo ocupará, en principio, una superficie de 28.016 metros cuadrados, situados entre la carretera de Móstoles a Villaviciosa de Odón y la de Extremadura (N-V) en dirección a Talavera. La franja de terreno discurre paralela al campus mostoleño de la Universidad Rey Juan Carlos, al otro lado de la autovía. En las nuevas instalaciones trabajarán 350 personas de la plantilla de Repsol, entre técnicos y ayudantes de laboratorio (137), coordinadores e investigadores (78), investigadores adscritos a programas concretos (84), administrativos y demás personas (44) y cargos directivos (7). Aunque la compañía no ha hablado aún de la creación de nuevos puestos de trabajo, el regidor mostoleño confió ayer en que "la llegada de esta importante empresa tendrá el efecto de que surjan otras a su alrededor, y ésas sí den trabajo". Consideración en la que abundó el edil de Urbanismo, Ildefonso Fernández, de Izquierda Unida, quien dijo que "hay que contar con los trabajadores que se encarguen de la construcción y con los de empresas terciarias que van a dar servicio al nuevo centro".

Las dependencias en ciernes dispondrán de varios edificios: laboratorios, dirección y servicios, un almacén y una planta central que agrupará las instalaciones básicas. En su entorno se repartirán los aparcamientos, instalaciones deportivas y un almacén de combustible. Para poner en marcha el centro tecnológico se necesitarán tres años y 9.500 millones de pesetas que aportará Repsol. Este año ya tiene previsto desembolsar 520 millones para los terrenos, proyectos de obras y pago de licencias y permisos al Consistorio. La inversión más elevada llegará entre 1999 y el año 2000, con 2.100 y 2.500 millones de pesetas, respectivamente, en concepto de edificación. El material y los equipos científicos le costarán a Repsol 2.000 millones más. El traslado desde Embajadores empezará en el año 2000, con un presupuesto de 300 millones.

La futura planta tecnológica desarrollará programas de investigación de gas y de las áreas refino-comercial y química, según los promotores del proyecto. El espacio sobrante de los 190.000 metros cuadrados adjudicados servirá para ampliar las instalaciones en un futuro, ya que la compañía otorga al proyecto "una vida media de 40 o 50 años".

El edil de Urbanismo de Móstoles espera que la implantación de Repsol sirva para animar a otras grandes empresas a elegir el municipio como sede definitiva.