El Gobierno da por concluidos los traspasos de competencias a vascos y catalanes

El Gobierno ha dado por concluida la etapa de los grandes traspasos de competencias a las comunidades autónomas y, a fecha de hoy, no está dispuesto a ceder la cuota de formación del Inem, que reclama el País Vasco, ni a suscribir el pacto fiscal que pide la Generalitat de Cataluña, según fuentes del Ejecutivo. La decisión se basa en que el modelo de desarrollo autonómico está muy avanzado y culminará entre esta legislatura y la próxima con el traspaso de la educación y la sanidad a las comunidades que aún no tienen estas competencias.

Tales comunidades son las dos Castillas, Madrid, Murcia, La Rioja, Baleares, Cantabria, Asturias, Extremadura y Aragón, que se igualarán en servicios a las comunidades gobernadas por los nacionalistas. Éstas sólo mantendrán como peculiaridades sus actuales hechos diferenciales: el concierto ecónomico del País Vasco; la lengua, en dicha comunidad y en Cataluña. España se colocará así a la cabeza de los países descentralizados, según el Gobierno. Con este mapa jurídico-político, el Ejecutivo no está dispuesto a dar "más tirones autonómicos", y considera que los estatutos de autonomía punteros, el vasco y el catalán, ya dan poco de sí. El Gobierno, aunque negocia las nuevas reclamaciones de competencias presentadas por el Ejecutivo vasco y la Generalitat en interpretación de sus estatutos, tiene decidido no ceder ante las de gran calado, como la de la cuota de formación del Inem, que reclama el PNV y que en su actual planteamiento roza la Constitución al afectar a la unidad de caja de la Seguridad Social, según el Gobierno. Tampoco está dispuesto a suscribir un pacto fiscal con la Generalitat que generalice el concierto económico, atribución exclusiva del País Vasco y Navarra.